En el acto informativo organizado por Nueva Economía Fórum, el ministro fue preguntado por una posible subida de impuestos y la armonización fiscal en España frente al modelo de la Comunidad de Madrid.

A este respecto, Escrivá dijo que “crear mecanismos de competencia en España visto desde fuera de España resulta peculiar”, dado que “todos los países desarrollados y en Europa” están embarcados en un proceso de “evitar la competencia fiscal entre países”.

El ministro señaló que las comunidades autónomas en España tienen competencias “enormemente importantes de provisión de servicios públicos” y “lo que hay que pedirles es que lo hagan bien, con estándares medios, y que tengan los recursos adecuados”, y acto seguido afirmó que “la competencia fiscal dentro de un país es disruptiva, pone en dificultades el mercado único”.

En esta línea, pidió tener “visión de país” y observar si “lo que estamos haciendo en España tiene sentido en algún estado descentralizado en nuestro entorno” y si “eso nos ayuda a todos o simplemente busca beneficios políticos de corto plazo”.

Respecto a la reforma fiscal, el ministro señaló que la comisión de expertos hará propuestas y aseguró que “no se trata de recaudar más, sino de que el sistema fiscal sea más justo”. En esta línea, se refirió a los beneficios fiscales en España, de los que dijo que suponen 70.000 millones de euros a los que “se renuncian” y son los más elevados de Europa junto con Italia.

“Hay que darle una vuelta” a esos beneficios y “lo lógico es que de este ejercicio salga un aumento de la recaudación”, dijo el ministro, para aclarar que “eso no es que los españoles paguen más, sino que lo que quiere decir que lo que hay en este momento son situaciones en los cuales determinados ámbitos de la economía están teniendo una infratributación que no está justificada desde el punto de vista de los objetivos últimos a alcanzar”. También, señaló que hay un margen “considerable” para mejorar la eficiencia del gasto público.