En un comunicado, el Consejo General de los agentes de la propiedad inmobiliaria indicó que, según datos de los registradores de la propiedad, en 2007, justo antes de la crisis financiera, las compraventas por parte de extranjeros supusieron un 8,29% de las totales, con casi 58.000 operaciones, tocaron suelo en 2009 y se empezaron a recuperar de forma constante hasta que en 2018 se produjo un récord en transacciones, con 65.400, el 12,64% del total.

La pandemia ha frenado esta tendencia y 2020 se cerró con 47.500 compraventas por parte de extranjeros, el 11,32% del total, que “sigue siendo un índice bastante positivo en cuanto a la solidez del mercado extranjero”, según la secretaria del Consejo General, Lola Alcover.

Afirmó que “salvo nuevos contratiempos en la evolución de la pandemia, el mercado se va a mantener y a corto plazo va a recuperar el terreno perdido en este último año”.

Según Alcover, “España es y va a seguir siendo, sin lugar a duda, uno de los destinos vacacionales más elegidos y uno de los favoritos entre la población europea para ubicar su segunda residencia, o su hogar tras la jubilación” y con el crecimiento del teletrabajo aumentará el interés.

La experta apuntó que las comunidades autónomas con mayores pesos de compra por extranjeros en el último año son Islas Baleares (más del 30%), Canarias (22,54%), Comunidad Valenciana (21,68%), Región de Murcia (19,35%), Cataluña (11,36%) y Andalucía (11,28%).

En cuanto a la nacionalidad, el 14,45% de las compras de extranjeros corresponden a británicos, seguidos de franceses (8,28%), alemanes (8,1%), belgas (6,14%) y suecos (5,17%).