Oficemen difundió este miércoles los datos de la estadística del cemento relativos a mayo, mes en el que el consumo de cemento totalizó 1.333.508 toneladas, 192.728 más que en el mismo mes de 2020.

La patronal pidió analizar “con cautela” el dato, dado que en mayo de 2020 había restricciones a la movilidad y no se había iniciado la desescalada.

El presidente de Oficemen, Víctor García Brosa, afirmó que “el sector aún no ha recuperado los niveles prepandemia, ya que si comparamos las cifras mensuales y del acumulado del año con las equivalentes en 2019 –último ejercicio no afectado por las restricciones del Covid19-, observamos una caída del 4,3% y del 4,2%, respectivamente, lo que en el cómputo anual supone todavía un diferencial cercano a las 260.000 toneladas”. El responsable de Oficemen agregó que “no tendremos una imagen fiable de la evolución real del sector para este año hasta después del verano”.

En lo que va de año, el consumo de cemento creció un 21,3% en comparación con el mismo periodo de 2020. Este porcentaje es tres puntos inferior al acumulado hasta abril, “lo que indica que ya se van reabsorbiendo los elevados crecimientos del inicio del año” por el impacto de la pandemia, según la patronal.

En valores absolutos, el consumo acumulado se situó en las 5.921.135 toneladas, un millón más que en el mismo período de 2020.

Por lo que respecta al dato de año móvil -desde junio de 2020 hasta mayo de 2021-, se registró un crecimiento del 7,2%, con un volumen de consumo acumulado en los últimos 12 meses de 14,4 millones de toneladas, 962.396 más que en el período precedente.

Por otra parte, las exportaciones, aunque continúan creciendo, lo han hecho de manera mucho más moderada en el mes de mayo, con un incremento del 1,5%, que ha permitido alcanzar las 575.000 toneladas, en un contexto, además, de caída de las importaciones.

En el acumulado anual, se han superado los tres millones de toneladas exportados en estos cinco meses.

Para Oficemen, los datos de comercio exterior “parecen esperanzadores, pero preferimos mantener la cautela, ya que muchos mercados competidores a escala internacional aún viven un contexto de incertidumbre por la pandemia”. La patronal consideró que una vez desaparezca la coyuntura, el contexto de los elevados costes de emisión de CO2 “pueden pesar en nuestra contra como país miembro de la UE, si no se toman medidas de ajuste en frontera”, según García Brosa.