En este acto informativo organizado por Nueva Economía Fórum, Roldán fue preguntado sobre la polémica en torno a las remuneraciones de los ejecutivos de la banca coincidiendo con los despidos colectivos planteados en algunas entidades como CaixaBank.

Adujo que la remuneración del sector “no está ni por encima de otros sectores, pensemos en el Ibex-35”, que tampoco es superior a la de otros países europeos y está “muy por debajo” de lo que se paga en Estados Unidos.

Aseguró que el sector tiene una regulación “muy detallada” sobre la política salarial “que no se centra en las cantidades, porque eso no tiene ningún sentido, sino en los incentivos que esa remuneración crea” para gestionar el riesgo.

Citó que existe remuneración ligada a la rentabilidad, la pérdida de una parte variable del salario “si la entidad no evoluciona de manera adecuada”, o la obligación de devolver remuneración ya percibida si la entidad se enfrenta a “un problema serio que pone en peligro su propia estabilidad”. La regulación de este asunto “es la más prolija de todos los sectores”, afirmó.

Además, recordó que los salarios de los ejecutivos los aprueban los accionistas en Junta y en la misma, “los debates son complicados” y las votaciones “no son unánimes”. A su juicio, “ése es el terreno natural donde estas cuestiones tienen que ser discutidas”. De hecho, destacó que el año pasado hubo una “enorme moderación” de los bonus de los ejecutivos “por solidaridad”, ante el impacto de la crisis del Covid-19.

Roldán concluyó que “tenemos que explicar mejor lo que hacemos y ejecutar mejor” incorporando los criterios ESG sobre sostenibilidad medioambiental, impacto social y gobernanza. Al ser preguntado sobre si habrá acuerdo en los ERE de las entidades que se están negociando, el presidente de la patronal bancaria consideró que “siempre hemos sido capaces de llegar a acuerdos con los sindicatos” y se han firmado dos convenios colectivos, lo que es “un valor añadido”.

Reconoció que estos pactos “los pagan los accionistas” y argumentó que “permiten mejorar la eficiencia del sector en su conjunto” y redundan en una “mejora de la rentabilidad”. “El no actuar no es la respuesta al desafío de la rentabilidad”, según Roldán, quien aseguró que el sector será capaz de dar una “rentabilidad adecuada” a los accionistas.

En el acto intervino el director de la cátedra EY Estabilidad Financiera de la Universidad de Navarra, Antonio Carrascosa, quien apuntó sobre este debate que, pese a las críticas a los ERE, “en el fondo esto refleja la positiva visión de nuestros bancos” con la que “se están anticipando a los retos”. Defendió que los gestores bancarios están afrontando los retos del sector “con mucha seriedad y visión estratégica”.

Por otra parte, Roldán fue preguntado sobre la prohibición a los bancos de repartir dividendos y vaticinó que “se va a levantar”. Hizo énfasis en que la medida es “extraordinaria para un periodo extraordinario” y “fue el precio a pagar” por una mayor flexibilidad regulatoria que al final fue “escasamente utilizada” por las entidades. Aseguró que el impacto ha sido “muy limitado” y que la medida fue “innecesaria” porque los bancos han podido aguantar durante la crisis.

“El café para todos no es una buena idea, ni siquiera en los momentos de crisis”, opinó, y consideró que son los supervisores quienes tienen que transmitir que la prohibición en el reparto de dividendos “no va a ser algo recurrente”.