La formación política de Inés Arrimadas inició esta legislatura con nueve senadores, pero a raíz de la moción de censura presentada junto con el PSOE en la Región de Murcia el pasado 10 de marzo, se produjo una sangría de bajas en el partido, agravada con el varapalo en las elecciones en la Comunidad de Madrid, en las que no obtuvo representación en la Asamblea regional.

Tras esta moción de censura, Fran Hervías abandonó el partido, dejó el acta, y decidió sumarse a las filas del Partido Popular. Para explicar su marcha, Hervías escribió una carta en la que acusaba a Ciudadanos de ser una “muleta del sanchismo”.

Poco tiempo después y siguiendo esta misma crítica de la deriva “sanchista” del partido, Ruth Goñi dejó el partido. En este caso, la senadora no dejó el acta porque, a su juicio, el escaño serviría para “apuntalar a Sánchez”.

En esas mismas fechas, Emilio Argüeso también anunció que cursaba baja en Cs, después de que el partido hubiese acordado iniciar un procedimiento de expulsión contra él. Este senador acusó también a su expartido de haber hecho un cambio “ideológico” y acercarse al Gobierno. Argüeso no dejó su acta como senador, sino que se pasó al Grupo Mixto.

PRIMERAS BAJAS Y CESES

Cabe recordar que el primer senador que perdió Ciudadanos fue Xavier Alegre a inicios de septiembre de 2020, tras conocerse que la Comisión Permanente de esta formación había decidido sustituir a Lorena Roldán como candidata a la Generalitat de Cataluña en las elecciones catalanas de febrero por Carlos Carrizosa, actual líder de Cs en Cataluña.

A continuación, fue Roldán quien, a finales de diciembre del año pasado anunció que dejaba Ciudadanos y pasaba a ser la ‘número dos’ de la lista del PP para los comicios en Cataluña. Roldán, quien también dejó su acta, acusó a su expartido de haberse apartado de su “esencia”.

A estas bajas hay que sumar las de Tomás Marcos y Carlota Santiago, quienes no han podido repetir como senadores de Cs al no obtener representación parlamentaria en la Asamblea de Madrid después de las elecciones del pasado 4 de mayo, ya que eran senadores por designación autonómica.

NUEVO GRUPO

Con todas estas bajas, la dirección nacional del partido decidió incorporar un nuevo senador andaluz por designación autonómica, y este fue José Luis Muñoz. Pese a esta incorporación, Ciudadanos solo contaba con tres miembros en su grupo parlamentario, una cifra insuficiente para tener grupo propio en la Cámara Alta.

Por ello, decidieron unirse a los otros dos partidos y crear un grupo que estará formado por seis senadores, tres de Ciudadanos, José Luis Muñoz y María Ponce por Andalucía y Miguel Sánchez por Murcia; dos de Teruel Existe, Joaquin Vicente Egea y Beatriz Martín Larred; y el senador de PRC, José Miguel Fernández Viadero.

Según Cs, este acuerdo permite que el proyecto liberal mantenga “todo su protagonismo” en el Senado, cuando “resulta a todas luces más necesario que nunca”, y que, además, “abunda” en la “pluralidad ideológica” de la Cámara, evitado que otras “sensibilidades constitucionalistas” queden “diluidas” en el Grupo Mixto.

Por su parte, Teruel existe señaló que, tras las elecciones de Cataluña y Madrid y la moción de censura en Murcia, se habían incorporado más senadores al Grupo Mixto, hasta llegar a 10 y podían ser 13 dentro de dos semanas si no “actuaban”. Así, serían un grupo formado por 13 senadores de siete fuerzas políticas, más dos senadores no adscritos.

Con su incorporación al nuevo grupo parlamentario, los dos senadores de Teruel Existe tendrán derecho a una pregunta oral cada seis plenos, por lo que, a su juicio, “ganan mucho”, ya que antes era cada nueve. “Creemos que es una decisión que permite no convertir el Grupo Mixto del Senado en un totum revolutum”, afirmó.