Vivienda

Más del 96% de los participantes en un programa ‘Housing First’ contra el sinhogarismo mantiene su vivienda estable 18 meses después

- Según una evaluación coordinada por la Universidad Complutense y auspiciada por Hogar Sí y Provivienda

MADRID
SERVIMEDIA

El 96,6% de las personas que participan en el programa Hábitat de 'Housing First' contra el sinhogarismo mantiene un alojamiento estable 18 meses después.

Esta es una de las conclusiones de la evaluación ‘Soluciones al sinhogarismo: evaluación de la metodología Housing First en España’, presentada este martes en rueda de prensa por Hogar Sí y Provivienda y desarrollada durante 18 meses por la Universidad Complutense de Madrid y la consultora Fresno.

La coordinadora de la evaluación e investigadora en Fresno, Leticia Henar, subrayó que, a la luz de los resultados de este trabajo y en línea con diferentes estudios publicados a nivel internacional, las personas que viven en viviendas ‘Housing First’ muestran mejores resultados en todas las dimensiones evaluadas que las que están viviendo en la calle o en otros espacios como albergues y centros de acogida de emergencia, y defendió como el “principal indicador de éxito del programa” el hecho de que casi el total de las que acceden a una vivienda continúan en ella después de 18 meses.

Según la experta, la evaluación, realizada en doce ciudades y en la que han participado 255 personas divididas en un grupo experimental y un grupo control, muestra que ‘Housing First’ consigue proporcionar un alojamiento “estable y seguro” a las personas en viviendas normalizadas en entornos comunitarios.

Esta mejora no se produce entre aquellas personas atendidas en el sistema tradicional de atención, dado que, según el estudio, de estas últimas, la mitad de ellas señalaban la calle, un centro de acogida de emergencia o un albergue como su lugar de residencia habitual a los 18 meses.

MEJORA SIGNIFICATIVA

En contraste, con 'Housing First’, a los seis meses ya se observa una “mejora significativa”, a su juicio, en su “satisfacción” con la vida, y las personas que cuentan con una vivienda bajo este modelo señalan que el padecimiento de dolor, la soledad, la ansiedad y la depresión “han disminuido claramente”, además de que se sienten “más protegidas” frente a situaciones discriminatorias y situaciones de victimización y reducen el uso de los servicios sociales y el ejercicio de la mendicidad “de forma drástica”.

Por lo que respecta a su evaluación económica, la coordinadora de la evaluación precisó que estas soluciones tienen un coste por plaza “similar” al de los albergues o alojamientos colectivos, pero ofrecen prestaciones “muy superiores” para los usuarios en cuanto a estabilidad y calidad del alojamiento y asistencia personalizada. Además, tiende a reducir costes, mientras que sus alternativas los incrementan, por lo que lo calificó de modelo “coste-efectivo”.

En España, su implantación comenzó en 2014 de la mano de Hogar Sí, y con la alianza formada con Provivienda en 2017 ya cuenta con 287 viviendas en ocho comunidades autónomas.

FENÓMENO ESTRUCTURAL

El director general de Hogar Sí, José Manuel Caballol, recordó que el sinhogarismo es un fenómeno “estructural” que afecta a entre 30.000 y 40.000 personas en España y que un 12,6% de la población ha visto vulnerado su derecho a la vivienda en algún momento de su vida.

En este punto, también subrayó que el 30% de las personas que se encuentran en esta situación sufre enfermedades graves, el 47% ha sido víctima de algún delito o incidente de odio y, en general, estas personas tienen 30 años menos de esperanza de vida.

A la luz de estos datos, el experto concluyó que el sistema tradicional de atención al sinhogarismo “no funciona” y defendió que los fondos europeos que llegarán a España para acelerar la recuperación económica suponen “una oportunidad que no podemos perder” para mejorar la situación de colectivos como el de las personas sin hogar, convencido de que este modelo sí “funciona” y supone un “dinero bien invertido” para lograr la erradicación del sinhogarismo.

Finalmente, el director general de Provivienda, Eduardo Gutiérrez, advirtió de que merced a este sistema “es posible que nadie viva en la calle y es posible conseguirlo si se acomete un cambio estructural en las políticas de atención al sinhogarismo”.

Gutiérrez explicó que el modelo de ‘Housing First’ se basa en una metodología “innovadora” que ofrece un hogar “digno, estable, independiente y con apoyo profesional a todas las personas y sin exigencias previas”.

Entre sus “principios básicos”, destacó el “respeto” a la toma de decisiones del usuario sobre la forma en la que quiere vivir y el tipo de apoyo que necesita, que será “flexible y estará disponible durante el tiempo necesario”.

El director general de Provivienda coincidió en valorar los fondos europeos de recuperación como una “herramienta muy eficaz” para abordar el problema y urgió a incluir en la futura Ley de vivienda el sinhogarismo “de manera explícita” y a “recoger como uno de sus objetivos su erradicación a través del 'Housing First’ o de otros modelos”.

(SERVIMEDIA)
25 Mayo 2021
MJR/clc