Así lo aseguró en la rueda de prensa que protagonizó en La Moncloa junto a la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, para presentar el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que afecta a sus departamentos.

Las vacunas que estudia la ponencia de Sanidad para ese personal sólo afectarían, matizó el ministro, a los docentes que participen en los exámenes.

Según Castells, “el tema de la Ebau es preocupante”, aunque subrayó que “hay un plan nacional de vacunación que depende del Consejo Interterritorial de Salud”, y que éste recibe “peticiones de vacunación de grupos muy diversos” y que “tiene que evaluar las prioridades”.

Para garantizar que la vacuna sea eficaz, los expertos deberán tomar la decisión cuanto antes, pues las pruebas de selectividad se celebrarán a principios de junio y para entonces los docentes deberían llevar varios días vacunados, como recomiendan los expertos en salud.

Por su parte, el ministro añadió que su departamento seguirá insistiendo y presentando a las autoridades sanitarias las peticiones que recibe “de los profesores y rectores”.

Respecto a los exámenes de final de curso a los que habrán de someterse los universitarios, Castells recalcó que serán “presenciales con medidas sanitarias”, siempre que no haya “cambios radicales” en la evolución de la pandemia, que “no ha acabado”, remarcó.

También aprovechó para emplazar a la comunidad educativa para trabajar en los protocolos que habrán de seguirse de cara al próximo curso. “Mi idea es, en agosto, hacer una reunión de la Conferencia de Política Universitaria y otra con la CRUE para adaptar medidas", avanzó.

EBAU PRESENCIAL

Su compañera de Gobierno también se refirió a las pruebas de la Ebau y apostó por la presencialidad de las mismas. “No hay ninguna polémica por la Ebau”, dijo, a la par que recordó que en la pasada edición de 2020 “hubo una mejora de resultados, con un 8% más de aprobados en bachillerato para ir a la universidad”.

La ministra también se refirió a la disparidad de tasas para hacer los exámenes de selectividad, que en algunas regiones llega a suponer un desembolso de 170 euros, y remarcó que son competencia de las comunidades autónomas. “Nadie se queda sin acceso a la universidad por un motivo económico”, aseguró.

Asimismo, Celaá anunció que ya trabaja en el diseño de medidas sociosanitarias para el próximo curso y que el próximo 19 de mayo participará en la conferencia sectorial con Sanidad para “prefijar” las medidas para el próximo curso en el que, pronosticó, continuará la “semipresencialidad”.