Sector financiero

Huertas urge al Gobierno a aprovechar la logística de las empresas para acelerar la vacunación, y al ciudadano a actuar “con responsabilidad”

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de Mapfre, Antonio Huertas, urgió este martes en ‘NEF Tendencias’ al Gobierno a aprovechar los recursos ofrecidos por el sector privado como la patronal CEOE o la propia Mapfre para acelerar la vacunación, y conminó al tiempo al ciudadano a transitar esta nueva etapa sin el estado de alarma “con responsabilidad” y “solidaridad” para evitar la aparición de nuevos brotes.

Durante su participación en este acto informativo organizado por Nueva Economía Fórum, apuntó que, “afortunadamente, estamos en una etapa diferente” donde, “prácticamente, se está viendo la luz al final del túnel”. Pero avisó de que “sería una lástima que ahora nos despistemos”, entretengamos y “no caminar con la seguridad y protección” exigible en esta parte final simplemente porque se vayan a retirar las restricciones al expirar el estado de alarma.

Huertas quiso aquí “apelar a la responsabilidad y a la solidaridad porque somos todos parte de la solución y parte del problema”, de forma que “todos podemos ser contagiadores” y llevar el virus de nuevo “a donde no queremos: a nuestro entorno, a nuestro propio trabajo”. Aquí desveló que el mensaje lanzado por Mapfre a sus empleados ha sido, precisamente, “tratar de minimizar el contacto social y en familias tener también cierto control para poder evitar un incremento no deseado” de los contagios.

“La situación está bastante mejor. Tenemos que llevar la desescalada con mucho cuidado, con mucha protección para que no nos pase como en el verano del 2020 y tratar de acelerar el proceso de vacunación en España y el mundo”, afirmó.

El presidente de Mapfre compartió por otro lado que, si bien en España la situación ha mejorado de forma notoria, continúa siendo “preocupante en muchas partes del mundo” y es “delicada en Latinoamérica”, con países como Argentina o Uruguay con saturación aún de los servicios públicos, y otros con problemas, como Brasil o México. En otras áreas y por el conocimiento directo como grupo en 44 países también refirió que la situación es compleja en Turquía o Asia.

Aquí demandó directamente a los países que colaboren y ayuden a países con más dificultades para acceder a los fármacos a disponer de ellos para superar la crisis sanitaria. “Se trata", expuso, de que "los países más pequeños, más humildes, puedan tener acceso a las vacunas” y se trate de hacer “un esfuerzo para garantizar una distribución equilibrada de la vacuna”.

A su juicio, toca además fomentar la colaboración pública-privada dentro de los países, instando a las autoridades a aprovechar los recursos que el sector privado ha puesto a su disposición para acelerar las vacunas. En el caso específico de España, recordó la invitación formulada por Mapfre al Gobierno, ofreciendo personal y centros para proceder a las vacunaciones, o la realizada a mayor escala por la misma patronal empresarial CEOE.

“Ningún país puede salir solo de esta crisis ni tampoco el sector público por sí solo puede afrontar una crisis de esta magnitud”, afirmó. “Deberíamos estar pensando en utilizar todos los recursos en manos públicas y privadas para facultar una vacunación más rápido”, insistió, invitando a remover cualquier desconfianza, si la hubiera, ya que la empresa se ha ofrecido a “colaborar de manera absolutamente desinteresada”.

Durante su exposición, intervino también la presidenta de Merck Healtchcare, Marieta Jiménez, quien se felicitó de que la salud se haya convertido en una “una prioridad en la Unión Europea”, cuando antes no lo era ni tampoco había grandes recursos para la investigación.

Valoró precisamente y en línea con las palabras de Huertas el compromiso por garantizar “el acceso igualitario a los 450 millones de europeos que somos” a las vacunas, además de ayudar a otros países, cuando antes “podía haber diferencias de un país a otro de hasta tres y cuatro años” desde que la autoridad del medicamento autorizaba un fármaco hasta que llegaba a los diferentes mercados.

Además, reivindicó el esfuerzo efectuado por la industria farmacéutica, que “en nueve meses ha sido capaz de poner a disposición de la salud y de los ciudadanos una vacuna desarrollada en un tiempo récord, cuando habitualmente el proceso de investigación lleva aproximadamente unos diez años”, lo cual atribuyó a una colaboración público-privada que debe fomentarse.

Jiménez defendió aquí precisamente que “las patentes son una herramienta fundamental para la innovación y para el progreso de un país”, justo cuando se cuestiona si deben liberarse para facilitar la fabricación más rápida de los fármacos. Según expuso, el problema ha sido la producción y “ya está solucionado”, puesto que las distintas marcas tienen ya previstas 12.000 millones de dosis “que dan para inmunizar a toda la población durante este año”, siendo ahora el problema “la distribución” y llevarla a todos los países.

(SERVIMEDIA)
11 Mayo 2021
ECR/clc