El ministerio público atribuye la familia diversos delitos, entre los que figuran los de asociación ilícita y blanqueo de capitales, por los que pide penas de entre ocho y 29 años de prisión para los hijos. Además de la pena que solicita para el mayor de los vástagos Pujol Ferrusola, la Fiscalía solicita 14 años para su hermano Josep y 8 años para los otros cinco hijos: Pere, Oleguer, Oriol, Mireia y Marta.

La única que se librará de sentarse en el banquillo es la matriarca, Marta Ferrusola, para la que el juez instructor Santiago Pedraz ha archivado la causa tras comprobar por informes forenses que padece una dolencia neurológica. Todos ellos serán juzgados en la Audiencia Nacional junto a otras personas por urdir una red clientelar que permitirá juzgarles por delitos de organización criminal, blanqueo de capitales, falsedad en documento mercantil, contra la Hacienda pública e incluso de frustración de la ejecución.

Entre los procesados en esta causa está también la mujer del primogénito de la familia, Mercè Gironés, para la que el fiscal solicita 17 años de prisión, y una decena de empresarios, que se enfrentan a cinco años de cárcel.