Clima

Biden eleva la ambición climática de EEUU con un recorte de emisiones de hasta un 52% en 2030

- Obama se comprometió a una reducción de entre un 26 y un 28% para 2025

- Hoy comienza la Cumbre de Líderes sobre el Clima y mañana hablará Sánchez

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este jueves que eleva el objetivo de reducción de emisiones netas de gases de efecto invernadero a entre un 50 y un 52% para 2030 con respecto a los niveles de 2005.

La Casa Blanca hizo oficial este anuncio en el marco de la Cumbre de Líderes por el Clima, convocada por Biden y en la que están invitados 40 mandatarios de todo el mundo, entre ellos el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, así como los jefes de Estado o de Gobierno de Brasil (Jair Bolsonaro), China (Xi Jinping), Francia (Emmanuel Macron), Alemania (Angela Merkel), Japón (Yoshihide Suga), Rusia (Vladimir Putin) y Reino Unido (Boris Johnson), entre otros.

El nuevo objetivo climático de Biden retoma la ambición climática de Barack Obama, que, en 2015, pocos meses antes de la adopción del Acuerdo de París, se comprometió a recortar las emisiones entre un 26 y un 28% para 2025 en relación a los niveles de 2005. Después, el mandato de Donald Trump estuvo sembrado de inacción en la lucha contra el cambio climático, hasta el punto de que este presidente decidió que su país saliera del Acuerdo de París, algo revertido por Biden nada más tomar posesión de su cargo el pasado 20 de enero.

El objetivo de Estados Unidos es inferior al de la UE, que se acerca a fijar por ley un objetivo de reducción neta de emisiones de gases de efecto invernadero en al menos un 55% para 2030 en comparación con los niveles de 1990, en lugar del 40% establecido actualmente, tal y como acordaron provisionalmente este miércoles los negociadores del Consejo Europeo y del Parlamento Europeo.

El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, anunció este martes un nuevo objetivo de reducción de emisiones del 78% para 2035 con respecto a los niveles de 1990, lo que supone el compromiso climático más ambicioso de las economías desarrolladas.

No obstante, los gobiernos locales, las empresas y otros líderes aplaudieron el anuncio de Biden, tras semanas de presión por parte de los científicos y el sector privado de reducir las emisiones estadounidenses al menos en un 50%.

Sin embargo, los defensores del medio ambiente afirman que es necesario hacer más para compensar el papel de Estados Unidos como mayor emisor histórico y ayudar a mantener el calentamiento global por debajo de los niveles más peligrosos, y también han pedido a este país que deje de financiar y exportar combustibles fósiles al extranjero.

La Administración de Biden indicó que el nuevo objetivo climático creará millones de empleos “bien remunerados”, garantizará la competitividad económica, promoverá la justicia ambiental, estimulará la innovación en tecnologías limpias y mejorará la salud y la seguridad de las comunidades en Estados Unidos.

El Gobierno estadounidense consultó a sindicatos, científicos, gobernadores, alcaldes, empresarios y universidades antes de decidir incrementar su ambición climática. Una de las metas es que el 100% de la electricidad provenga de fuentes renovables en 2035.

Otros analistas han trazado varias vías para reducir en un 50% para 2030 los niveles de emisiones de 2005. Así, las políticas para lograrlo podrían suponer reducir las emisiones de metano del petróleo y el gas en un 66% para 2030 y asegurar que todos los coches vendidos en Estados Unidos para 2035 sean de cero emisiones.

(SERVIMEDIA)
22 Abr 2021
MGR/gja