Así lo indicó Bal tras la visita a esta urbanización, donde se comprometió a regular, en colaboración con los ayuntamientos, la situación de todas las edificaciones que han surgido en estos 26 años en la región y que se encuentran fuera de ordenación.

En concreto, propuso elaborar una ley similar a la 9/1985, de 4 de diciembre, especial para tratamiento de actuaciones urbanísticas ilegales en la Comunidad de Madrid para acabar con esta situación.

Según Ciudadanos, estas urbanizaciones se encuentran en situación de “irregularidad” porque los planes generales de sus municipios no los han integrado o porque no han sido recepcionadas por sus ayuntamientos.

Además, añade, no cuenta con servicios básicos como saneamiento, luz, agua, asfaltado de viarios o recogida de basura, aunque los ayuntamientos cobran impuestos como el IBI o la tasa de basuras. La problemática de estas urbanizaciones, continúa Cs, se “agrava” con la situación de “ocupación” en la que se encuentran algunas de sus viviendas.

En total, el partido de Inés Arrimadas lamenta que entre 50 u 70 casas se encuentran okupadas, llevando a los vecinos a montar “redes de alerta” para evitar un “aumento de las usurpaciones”. Además, recuerda que han sufrido incendios tras las amenazas de los okupas a los propios vecinos.