Así se expresó en la rueda de prensa anterior a la Junta de Portavoces, aclarando que no tiene un gran conocimiento del tema y que “hace mucho que en el fútbol dejó de tener la importancia que debían tener la afición, los aficionados, la camiseta”. No obstante, criticó tácitamente que, en la Superliga, se pueda “impedir que equipos pequeños como el mío (él es del Espanyol) puedan llegar a jugar nunca con el Bayern de Múnich una eliminatoria europea”.

Rufián también barajó la posibilidad de que se trate de “un chantaje” de los clubes a la UEFA para que se les pague más en la Liga de Campeones, pero terminó prefigurando que “los millonarios se suelen poner de acuerdo” y, por tanto, pese al actual desacuerdo entre ambas partes, “de aquí a unos meses seguramente se estarán abrazando”.