Así lo señaló en su intervención en unas jornadas organizadas por el periódico ‘El Español’ en las que fue preguntada por la reforma fiscal que quiere lanzar el Ejecutivo y para la que ha creado un grupo de expertos que deberá presentar sus conclusiones antes de febrero del próximo año.

“Ahí se podrá plantear la revisión de las figuras fiscales” y “acompañando un momento” en el que desde Estados Unidos se ha mostrado una postura proclive a “revisar los rendimientos y la eficacia” del impuesto de Sociedades, según argumentó la ministra.

En este sentido, Montero señaló que la reforma del Gobierno busca “revisar el sistema tributario” y en ese marco “puede haber figuras que no haya que plantear necesariamente una subida, sino una bajada”. Citó que, en Sociedades, las pymes enfrentan un tipo efectivo más alto que las grandes empresas y el objetivo es establecer un mínimo efectivo que se acerque al tipo real de la ley, que “se paguen impuestos allí donde se generan los beneficios” y que tributen actividades hasta ahora “opacas”.

La ministra destacó que “la fiscalidad tiene que acompañar el momento económico” en referencia a la demora en el cobro del impuesto a los servicios digitales y “nos encontramos en un momento económico que es evidente que tiene que modular las decisiones fiscales”. “Cada figura se tendrá que adaptar, no necesariamente en 2022, en el año 2023, ya veremos cuál es el momento adecuado”, puntualizó.

Sobre la fiscalidad medioambiental, la titular de Hacienda argumentó que España es el tercer país por la cola en esta materia y “tenemos que tener la osadía” de abordarla para “penalizar aquellas conductas que son agresivas con el medioambiente” y “promover” otras.

Montero afirmó respecto al impuesto al diésel que “no lo incorporaría como un impuesto a la clase media” sino como un impuesto para “penalizar un combustible agresivo” que “tenemos que intentar ir eliminando”. Ese tributo “podría entrar” en la citada reforma fiscal “si los expertos consideran que es una línea adecuada”, puntualizó.

Por otra parte, afirmó que cuando se vuelvan a activar las reglas fiscales “tendremos que presentar” el plan de reequilibrio de las cuentas que exige la ley y explicó que con la revisión a la baja del PIB “ajustaremos todos los parámetros” que se estimen en el Plan de Estabilidad que el Gobierno debe enviar a Bruselas antes de que finalice el mes.

Montero también se refirió a la armonización fiscal para defenderla y criticó a la Comunidad de Madrid por su “fiscalidad a la baja” por ser la capital de España. Aseguró que “Andalucía y Galicia siempre han pedido armonización fiscal”.

Defendió que “no es ni mucho menos contradictorio” su posición en este punto y la del candidato socialista a la presidencia de la Comunidad de Madrid, Ángel Gabilondo, quien ha prometido que no subirá los impuestos a los madrileños.