Así se expresó Ribera en un evento organizado por ‘El Economista’, donde recordó que se trata de un fondo de pensiones que ha declarado su voluntad de invertir en empresas con alto grado de compromiso con la transición energética y que hayan mostrado su implicación con valores de sostenibilidad ambiental, social y de buena gobernanza.

Ribera, quien aclaró que dicha afirmación no supone que se muestre favorable a que el Gobierno dé su visto bueno a la opa, destacó que la oferta es “una buena noticia” y “una señal de confianza en nuestro país y en el sector en un momento en el que hemos acometido un proceso de reconversión muy intenso, muy rápido y con un proceso regulatorio notabilísimo”.

“Es buena noticia que esto despierte confianza fuera”, reiteró la ministra, quien añadió que “nuestro sistema energético es un asunto delicado, complicado en el que es importante contar con inversores con vocación de permanencia y con vocación industrial, más que con vocación especulativa o de corto plazo”.

Por ello, explicó que “hay que ver con mucho detalle” la operación en relación con el perfil inversor y la estructura accionarial que hay detrás de IFM, para estudiar la posibilidad de introducir limitaciones o cautelas adicionales a la operación.

En esta línea, incidió en la importancia de “combinar la responsabilidad de evitar movimientos especulativos y al mismo tiempo hacerlo con pleno respeto a la legalidad” y aseguró que “lo estamos estudiando bien y vamos a ser serios y vamos a explicar hasta el último detalle qué hacemos y por qué lo hacemos en la medida de que Naturgy es una empresa fundamental, sistémica y estratégica del sector energético de este país”.