Por estos hechos es investigado en la Audiencia Nacional el alcalde de Leiza, Oier Eizmendi Astibia, perteneciente a Bildu. El fiscal responsabiliza a este primer edil de que el 10 de agosto, coincidiendo con el comienzo de las fiestas locales, se exhibieran en el balcón del Ayuntamiento carteles a favor de los reclusos etarras.

Como respuesta a este episodio, VCT, que preside Francisco José Alcaraz, se trasladó hoy a Leiza junto a un grupo de víctimas del terrorismo. Los convocados recordaron que el 24 de septiembre de 2002 fue asesinado en esta localidad navarra el guardia civil Juan Carlos Beiro. El agente falleció por las heridas causadas por una pancarta-bomba colocada por ETA.

En este sentido, la iniciativa organizada por VCT consistió en un homenaje a Juan Carlos Beiro en la plaza del Ayuntamiento de Leiza y en una eucaristía en memoria de este agente asesinado. Posteriormente, los asistentes se desplazaron hasta el lugar donde en 2002 explotó la pancarta-bomba que acabó con la vida del guardia civil.

Durante la concentración en la plaza del Ayuntamiento, que comenzó pasadas las 13,00 horas, se mostraron fotografías de Juan Carlos Beiro con el lema "Justicia". Además, tomó la palabra la viuda de Beiro, María José Rama.

Esta viuda pidió "dignidad y justicia" para las víctimas del terrorismo. Asimismo, se refirió a que no se puede mandar a una persona como su marido a morir en Navarra “para luego negociar con sus asesinos".

Por su parte, Alcaraz se refirió a que con esta concentración en Leiza habían querido realizar “un acto de desagravio” al episodio de enaltecimiento del terrorismo que se dio en esta localidad navarra el pasado 10 de agosto coincidiendo con el inicio de las fiestas.