En un rifirrafe entre el líder de Podemos y el senador Tomás Marcos (Cs) durante la sesión de control al Gobierno en el Senado, Iglesias trasladó a ese partido su “lamento” por que “su formación política vaya a desaparecer”, señalando que “su legado será haber sostenido al partido más corrupto de Europa y abrirle la puerta de las instituciones a la ultraderecha”.

Marcos le había reprochado previamente que, como vicepresidente de Derechos Sociales, haya “ignorado al movimiento social de la discapacidad con una ausencia total de contacto cercano”, y le afeó su “falta de entendimiento y comprensión” hacia el Tercer Sector de Acción Social con medidas como el cambio de criterios para el reparto de la 'X solidaria'.

En su respuesta, Iglesias criticó que “viene aquí a hablar de Tercer Sector cuando sus aliados de Vox llaman chiringuito a las ONG y llaman mafiosos a los voluntarios de la Cruz Roja que ayudan a la gente que huye del hambre y de la miseria”.

También defendió su gestión y dijo que “ha sido la Vicepresidencia social la que ha revertido los recortes en dependencia con 600 millones de euros”.