El plan GM2010, cuyos resultados han sido verificados por terceros, fue lanzado el año 2006, tenía como objetivo reducir el impacto ambiental de la compañía durante el período 2006-2010.

Así, ha conseguido una reducción de la emisión de CO2 de 1,53 millones de toneladas en sus empresas durante el ejercicio 2010, producidas tanto de forma directa como indirecta. Esto representa una reducción del 31 por ciento en comparación con el ejercicio 2000, lo cual supera ampliamente el objetivo inicial del 7 por ciento previsto en el plan.

Entre las iniciativas se incluía el uso en sus procesos de fabricación de materiales alternativos para sustituir otros con alto potencial de calentamiento global, así como la reducción de emisiones energéticas de CO2 mediante la instalación de sistemas energéticos avanzados optimizados por especialistas en ahorro de energía, con el fin de conseguir una eficiencia energética en las oficinas y plantas de fabricación.

De esta forma se ha conseguido una reducción en la generación de residuos de un 54 por ciento, cuando el objetivo era de un 40 por ciento, y una disminución del consumo de agua del 41 por ciento, frente al 20 por ciento que se había fijado la compañía.

En cuanto a la emisión de compuestos orgánicos volátiles (COVs), que se usan especialmente en la producción de semiconductores, la reducción ha sido de un 35 frente al objetivo fijado del 40 por ciento.

La multinacional japonesa trabaja desde abril de 2011 en una nueva línea de iniciativas para alcanzar los objetivos establecidos en su programa “Green Management 2015” (“GM2015”), el sucesor del plan GM2010, y que tiene como misión llegar a la huella medioambiental cero en el año 2050.

Asimismo, se han definido indicadores específicos para cada etapa del ciclo de vida del producto y del I+D del reciclaje de productos, y así asegurar el logro de las metas medioambientales a medio plazo.