Según informa la Benemérita, la detención ha sido posible gracias al trabajo de análisis de las denuncias interpuestas en el municipio, que permitió hallar un punto en común entre algunas de ellas.

Así, varias personas habían denunciado la ausencia de objetos de valor de sus domicilios, sobre todo joyas, gafas de sol y productos electrónicos de pequeño tamaño. Los agentes comprobaron que los ladrones no habían producido daños en ninguno de los domicilios, por lo que inmediatamente sospecharon de las personas que los frecuentaban.

Un segundo punto en común encontrado por la Guardia Civil fue que en todas las casas robadas trabajaba una misma empleada del hogar, que fue localizada en las cercanías de su residencia en Madrid.

Anteriormente, la mujer había intentado eludir a los agentes con la ayuda de un familiar, que aseguraba que se encontraba en Málaga. El registro del domicilio de la ahora detenida permitió hallar varios de los efectos denunciados como sustraídos, además de otros de procedencia desconocida.

La arrestada, argentina de 41 años de edad, está acusada de tres delitos de hurto, aunque no se descartan nuevas imputaciones.