Zapatero se despide del Senado apostando por su reforma en la próxima legislatura
- El presidente califica de "muy amable" su última sesión de control en la Cámara Alta
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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se despidió este martes del Senado con una apuesta para que la Cámara Alta pueda reformarse durante la próxima legislatura, un objetivo en el que coincidió con el portavoz del Partido Popular, Pío García-Escudero.
Los dos dirigentes, que durante casi ocho años han sido rivales en las sesiones de control del Senado, protagonizaron esta vez un careo de guante blanco, con un tono sumamente cordial, repleto de reconocimientos mutos e incluso elogios en ambas direcciones.
García-Escudero puso de manifiesto desde el primer momento que esta era la última intervención de Zapatero en la sesión de control de la Cámara Alta, por lo que su intervención tendría "cierto aire de despedida". Al terminar, el propio presidente reconoció ante la prensa que había sido una tarde "muy amable" por las palabras cariñosas que le habían dedicado buena parte de los parlamentarios.
La pregunta del portavoz del PP consistía en realidad en un balance de estos ocho años, de los que no tuvo reparos en reconocer que Zapatero había cometido un "acierto" cuando hace casi ocho años se comprometió a acudir una vez al mes al Senado para responder las preguntas de la oposición, lo cual ha sido "muy beneficioso" para esta institución.
García-Escudero aprovechó la reciente reforma de la Constitución para hacer una invitación a Zapatero a que los dos grandes partidos políticos se pongan de acuerdo la próxima legislatura con el fin de modificar el funcionamiento y las tareas del Senado.
Aseveró que los últimos acontecimientos demuestran que PSOE y PP pueden "acometer juntos una reforma de la Constitución" que mejore las funciones del Senado y proclamó que "ojalá se pueda la próxima legislatura".
Zapatero recogió el guante con gusto en el turno de respuesta y coincidió en el deseo de que "se pueda" llevar a cabo "la próxima legislatura", si bien advirtió de que "no es fácil" por el sistema de designación de los senadores y por la relación predominante entre las comunidades autónomas y el Estado, que siempre recae en el Ejecutivo.
García-Escudero citó la celebración de la Conferencia de Presidentes como otro de los logros de estos años, aunque recordó que la idea de esa cumbre era del presidente fundador del PP, Manuel Fraga, quien acaba de anunciar que no repetirá como senador la próxima legislatura y para quien tuvo unas palabras de cariño.
Como pequeño reproche, criticó a Zapatero que sólo haya convocado un Debate sobre el Estado de las Autonomías cuando antes de llegar a La Moncloa se quejaba de que su antecesor, el popular José María Aznar, había hecho lo mismo en ocho años de mandato.
En su contestación, al presidente del Gobierno no le importó reconocer que después de aquel debate, en el que tuvo que enfrentarse durante jornadas maratonianas al debate con los distintos presidentes autonómicos, comprendió "muy bien por qué Aznar sólo había hecho uno".
García-Escudero destacó que los debates con Zapatero habían sido "muy intensos" durante estos años pero confesó su "máximo respeto" hacia el presidente del Gobierno tanto por el cargo que ostenta como en el aspecto personal, que considera de "mayor importancia" que la rivalidad política.
En este clima, deseó a Zapatero "lo mejor en los aspectos personal y familiar" y terminó con un mensaje convencido de que el también secretario general del PSOE "puede conseguir todo aquello que se proponga" una vez que abandone La Moncloa tras las elecciones generales. "Mucha suerte", le deseó.
Zapatero siguió la misma línea. Manifestó su "máximo respeto" hacia el portavoz del PP y dijo comprender que durante estos años "haya sido duro" en la tarea de crítica como principal representante de la oposición. "Lo entiendo dentro de la dialéctica de un Parlamento", comentó.
Asimismo, trasladó a García-Escudero su "respeto" y también le deseó "lo mejor", pero "sólo en lo personal, no en lo político", especialmente ante las elecciones generales del próximo 20 de noviembre. El portavoz del PP entendió esas palabras, que recibió con una sonrisa.
Finalmente, el presidente del Gobierno destacó que en estos ocho años en los que ha acudido al Senado a responder las preguntas de la oposición en la sesión de control ha tenido la oportunidad de responder "156 preguntas parlamentarias" y resaltó que ha sido la "primera vez" que el jefe del Ejecutivo ha hecho algo parecido.
(SERVIMEDIA)
13 Sep 2011
PAI/jrv