En una entrevista en Servimedia, Granado afirmó que “todos los partidos de derechas que han concurrido a las elecciones en Europa han prometido bajar los impuestos, y, si han ganado, todos los han subido”.

El secretario de Estado apuntó que empieza a haber un cambio en la postura del PP que ya no habla de bajar los impuestos sino de que es necesaria una reforma fiscal ante la caída de los ingresos.

Según Granado, esto es una “incoherencia” ya que lleva “ocho años negándose” a aumentar la tributación y “ahora, de repente, dice que hay que hacerlo”.

En este sentido, el responsable de Seguridad Social defendió que el principio de estabilidad presupuestaria no significa reducir gastos para acomodarlos a los ingresos, sino “garantizar la estabilidad de las cuentas públicas”.

Así, subrayó que hay “determinados niveles de gasto que se deben de mantener”, como los dedicados a la educación.

RECORTES EN EDUCACIÓN

Granado admitió que está “muy preocupado” con los recortes en el empleo en la educación anunciados por la Comunidad de Madrid, ya que supondrá un “deterioro” a largo plazo.

El secretario de Estado explicó que recortes en otras áreas, como pensiones o sanidad, se pueden recuperar en el corto plazo, pero la reducción del gasto en la educación lo que hace es “sembrar la desigualdad para dentro de 20 años”.

Para el responsable de la Seguridad Social, “si la reducción del gasto se hace bien, el impacto sobre el empleo puede ser mínimo”. Sin embargo, las propuestas anunciadas por el Gobierno autonómico madrileño “focalizan la disminución del gasto en actividades intensivas en el empleo”.

Además, denunció que en Madrid se mantengan deducciones fiscales para la utilización de la enseñanza privada “a la vez que se reduce la calidad de la educación en los servicios públicos”.

Para Granado, “eso va en contra del principio de la estabilidad presupuestaria”, ya que “no se pueden deteriorar los servicios y las cuentas públicas a base de regalos fiscales”.

Asimismo, criticó que la propuesta de ampliar la jornada lectiva es “una bobada” y afirmó que “de lo que se está hablando es de una reducción del número de profesores”.

En su opinión, si lo que se busca es un esfuerzo de los docentes para “reforzar” la educación, se deberían de ampliar los días lectivos en los que están abiertos los colegios u ofrecer actividades que normalmente se hacen de forma extraescolar. Sin embargo, insistió en que “de lo que se está hablando es de otra cosa”.

En cuanto a la posibilidad de crear un impuesto a las grandes fortunas, Granado defendió que en un momento como el actual es algo “bastante razonable”, ya que considera que es necesario para poder mantener la “cohesión social”.

Además, afirmó que con este impuesto se podría mantener entre un 50% y un 60% de la recaudación que tenía el impuesto de patrimonio pero afectando sólo al 15% de los contribuyentes.