En un acto en Bilbao con cargos públicos socialistas, el candidato reiteró que se siente cómodo en el debate sobre el equilibrio presupuestario, entre otras cosas porque siempre lo ha defendido y porque los españoles “vivimos desde Maastrich” con ese principio.

Además, la Ley de Estabilidad Presupuestaria se aprobó en 2006 con el voto en contra del PP, que abogaba por “una cosa mucho más dura”, el déficit cero.

La impulsó el PSOE, recordó, precisamente por la convicción de que el déficit y en endeudamiento excesivo son “dinamita” para el estado del bienestar.

Sin embargo, alertó contra quienes pretenden utilizar la crisis y el necesario equilibrio presupuestario “para recortar” servicios públicos y políticas sociales, y a los que se refirió como “recortadores profesionales” porque en realidad ven la oportunidad de hacer realidad su ideario.

Frente a ellos, frente a la opción de “no subir impuestos a nadie y bajar gastos sociales”, defendió “otra manera” de reducir el déficit, “se sube el Patrimonio y se quitan las diputaciones, pero no quitas ni sanidad ni educación”.

Ese es el debate de los próximos meses, dijo el candidato, que pidió al PSOE basar la campaña electoral en la explicación a los ciudadanos de las distintas opciones.

En la misma línea, Patxi López presentó a Pérez Rubalcaba no sólo como “el mejor” candidato sino como el presidente que podrá seguir garantizando el estado del bienestar, frente a quienes “en cuanto cogen el poder empiezan a recortar y de manera brutal” los servicios públicos y las políticas sociales.

López invitó de hecho a los ciudadanos y a los dirigentes del PP a “darse una vuelta” por distintas comunidades autónomas para comprobar cómo, por ejemplo, en el País Vasco “somos capaces de hacer más con menos” sin recortar políticas sociales.