Desde las patronales CEOE y Cepyme lamentaron que no se incluyan modificaciones relativas a la contratación a tiempo parcial en el proyecto de real decreto.

Para los empresarios, la decisión del Gobierno "supone, de nuevo, una oportunidad perdida en la flexibilización de este contrato", cuya utilización está al menos 5 puntos porcentuales por debajo de la media de los países del entorno.

Por su parte, desde UGT apuntaron que "son muy negativas porque debilitan la posición y los derechos de los trabajadores y ahondan en un modelo económico que ya ha demostrado sus flaquezas ante las dificultades".

Mientras, para CCOO "suponen un nuevo ataque al diálogo social y una total falta de respecto a los interlocutores sociales".

Desde las organizaciones sindicales denunciaron el impacto que tendrá en los jóvenes el nuevo contrato de formación, pues entienden que los condenan a la temporalidad y bajos salarios.