Este indicador permite analizar la competitividad del sector exterior, comparando para ello la evolución de los precios españoles con la de los precios de otros países con los que España mantiene relaciones comerciales.

Frente a los países de la zona euro, el ITC aumentó un 0,9% interanual en el conjunto del primer semestre de 2011, lo que supone una pérdida de competitividad.

Un aumento del índice implica una pérdida de competitividad exterior de la economía española frente al grupo de países respecto del cual se construye el índice, explicaron desde Industria.

Mientras, frente a los países de la UE-27, el ITC calculado con IPC registró un incremento del 0,4%, aunque si se compara con los miembros de los 27 que no están en la zona euro el índice cae un 1,8%, lo que supone una ganancia de competitividad.

En cuando a los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en la primera mitad de 2011 España perdió competitividad, al subir el ITC un 0,6% interanual.