El proyecto plantea la firma de un convenio de colaboración entre cada centro educativo y la Consejería de Educación de su comunidad autónoma. Según el mismo, el centro se comprometerá a incrementar el éxito escolar de sus alumnos mediante un proyecto de mejora, en el que se especificarán los objetivos, los compromisos y los recursos disponibles, así como una evaluación de los resultados obtenidos.

La distribución de estos casi 37 millones se ha acordado siguiendo dos criterios: por un lado, el número de alumnado de cada comunidad; y por otro, la dispersión de los centros medida con el número de los mismos. De esta manera, la comunidad que más se beneficiará de estas ayudas será Andalucía, seguida de Cataluña y Madrid.

Con esta distribución económica, el Gobierno impulsa uno de los objetivos contemplados en el Plan de Acción 2010-2011 que desarrolla el Ministerio de Educación, el "éxito educativo de todos los estudiantes". Así, se pretende incrementar el número de estudiantes que obtienen el título de graduado en Educación Secundaria Obligatoria, al mismo tiempo que se busca elevar el número de jóvenes que continúan su formación en la Educación Postobligatoria, especialmente en Formación Profesional de Grado Medio.