Lo dijo en una entrevista en Telemadrid recogida por Servimedia, en la que comentó la situación en que se encuentra la entente del pasaporte de vacunación comunitario después de que el último Consejo Europeo acordara la creación de un sistema que permita compatibilizar los distintos pasaportes de vacunación que están elaborando los distintos Estados miembros.

La Comisión Europea dispone de tres meses para definir los requisitos técnicos de este tipo de sistema que los líderes comunitarios confían en que esté disponible para este verano.

La jefa de la diplomacia española comentó la idoneidad de poner en marcha este tipo de sistemas a nivel comunitario, lo que de modo implícito supone descartar el desarrollo de uno similar a nivel nacional.

No obstante, dejó claro que el fin último de este pasaporte de vacunación es “abrir con seguridad la movilidad” entre los 27 e incluso con terceros países, “no impedir a los no vacunados” circular libremente por territorio comunitario, quienes “podrán hacerlo como hoy”, previa realización de PCR y siguiendo las restricciones impuestas por cada uno de los Estados miembros.

González Laya también se refirió a la situación del plan de vacunación en la UE. Lo hizo recalcando lo inédito del momento histórico actual, marcado por el desarrollo en un año de una vacuna que ha de producirse a nivel mundial, lo que genera “cuellos de botella”.

Por ello, conminó a llevar a cabo un “gran esfuerzo europeo” para “producir más y más rápido” dosis y, a su vez, garantizar un “acceso equitativo” a las vacunas, ya que “los europeos no estaremos a salvo hasta que lo esté todo el mundo”.

En clave nacional, constató que “la campaña de vacunación está muy avanza”, como lo atestigua el hecho de que España sea el “cuarto país del mundo” en número de vacunas inoculadas a su población. Ello demuestra, dijo, el alto nivel de la Atención Primaria en el país.

González Laya comentó que “en España hay poco de geopolítica o diplomacia” en torno a las vacunas, puesto que su único objetivo es disponer de antídotos “seguros y eficaces”. Prueba de ello, continuó, es que el Gobierno ha suscrito contratos para abastecerse con hasta ocho remedios que no comenzarán a inocularse hasta que reciban el visto bueno de las autoridades europeas y españolas competentes en la materia.

A su vez, llamó a no sorprenderse ante los distintos puntos de vista que los Estados miembros manifiestan sobre la estrategia a seguir frente al coronavirus, ya que dentro de cada uno de los 27 también existen esas divergencias.

A pesar de ello, instó a concentrarse para alcanzar ese “punto de no retorno” en el que haya más personas vacunadas que contagiadas.

Por último, condenó la celebración de fiestas en domicilios privados, y recordó que este tipo de actos no están prohibidos “para fastidiar a los ciudadanos, sino para salvar vidas y relanzar la economía”.