Durante su intervención en el curso “Integración y cohesión social en un nuevo contexto social y jurídico”, en el marco de los Cursos de Verano de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) en San Lorenzo de El Escorial (Madrid), indicó que la libertad de circulación está asegurada y que se trata de “una decisión de orden laboral vinculada a la situación excepcional de nuestro mercado de trabajo”.

Gómez explicó que la moratoria no afecta al trabajo por cuenta propia, ni a los ciudadanos de origen rumano que se encuentren actualmente trabajando en España, ni a los que han perdido su empleo.

De esta forma el ministro destacó que afectará sólo en el futuro a “aquellos ciudadanos rumanos que pretendan trabajar en España”, ya que “lo tendrán que hacer con un permiso de trabajo previo”.

Además aclaró que “la legislación europea permite que existan en los gobiernos nacionales acuerdos de aplicación excepcional y transitoria de la moratoria con respecto a los permisos de trabajo de los ciudadanos afectados por la ampliación de Europa a una unión con 27 países, entre ellos Bulgaria y Rumanía".

Asimismo explicó que “cuando comenzó a aplicarse la moratoria inicial primera, la población rumana en España era algo superior a los 200.000” mientras que “cuando adoptamos la restauración de la moratoria está en este momento en 870.000 personas”.

Según dijo, “el acuerdo establece la creación de un grupo de trabajo entre las autoridades rumanas y españolas para ir evaluando la situación” y agregó que la medida “no puede superar el año 2014”, ya que es “la fecha límite prevista para que cualquier país de la Unión pueda tener alguna moratoria para la libertad de trabajo”.

Por otro lado, sobre la cumbre extraordinaria del Eurogrupo celebrada ayer en Bruselas, dijo que “ha habido resultados importantes” y aseguró tener la impresión de que “podemos estar por fin en el camino de recuperar confianza, capacidad y fuerza”.

EDUCACIÓN

Durante su intervención, el ministro abordó el tema de la educación del que destacó que hay “600.000 jóvenes que no tienen ni siquiera la Educación Secundaria Obligatoria (ESO)” por lo que anunció diferentes medidas encaminadas a paliar esta situación.

Entre estas apostó por que los jóvenes “pudieran acreditar con relativa rapidez una formación que les permitiera o bien ser empleados o bien continuar el ciclo formativo”.

Otra de las alternativas fue la de diseñar un nuevo modelo de formación profesional (FP) basado en el modelo dual de Alemania, en el que tenga lugar la combinación de empleo y formación al constituirse una FP a tiempo completo y una FP a tiempo parcial en el que se compatibilice con un trabajo.