En la defensa de la ley, el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, defendió que el proyecto de ley se ha diseñado “lo más flexible posible para fomentar su permanencia en el tiempo”.

En este sentido, el responsable de Industria afirmó que la reforma de la ley de telecomunicaciones “refuerza los derechos y la protección” de los usuarios.

En concreto, destacó que los usuarios finales tendrán derecho “a una mayor información” sobre el servicio que van a contratar y refuerza “la protección de los datos personales”.

El ministro también subrayó otras “importantes novedades” que introduce la ley, que son fruto de la incorporación de las directivas europeas, el llamado “paquete telecom”, como el establecimiento de un periodo de un día para el cambio de compañía telefónica (portabilidad).

También hizo hincapié en la “definición como infracción” por parte de las compañías del incumplimiento de las resoluciones “que ponen fin a los procedimientos de reclamación de los usuarios”.

Asimismo, el ministro apuntó que la reforma “refuerza las competencias de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT)”, que es el órgano regulador del sector.

Por su parte, el diputado del PP Miguel Ángel Cortés denunció que la incorporación de estas directivas comunitarias “llega tarde” y aseguró que “tiempo ha habido” para haberlas aprobado con anterioridad.

En este sentido criticó que el ministro, en vez de centrarse en aprobar esta ley, “ha estado ocupado cambiando altos cargos de su ministerio para dejar colocados a amigos”.

También afirmó que el paso de Sebastián por el Gobierno “será recordado por la broma de las bombillas”, así como por su “pelea adolescente con el presidente de la cámara” por el caso de la corbata.