Esta propuesta "de movilización social pacífica", como la definen sus organizadores, partió a finales de junio reuniendo a decenas de caminantes que se dividieron en siete marchas, con el propósito de llegar a la capital. La de Tenerife llegará a Santa Cruz.

El objetivo de las mismas, según informaron este miércoles, es llevar las reivindicaciones del 15-M al medio rural, y recoger asimismo las preocupaciones y denuncias de los habitantes de los pueblos para traerlas a Madrid.

El próximo sabado a las 21:00 horas confluirán las marchas en Sol, donde se juntarán con más indignados que llegarán desde toda España en 30 autobuses.

Allí se llevará a cabo una asamblea narrativa en la que se pondrán en común dichas inquietudes recogidas durante todo el camino. Además, se producirá una conexión en "streaming" con otras plazas del resto de Europa.

Antes de llegar al "kilómetro cero", las siete marchas serán recibidas el sábado por las asambleas de los barrios, cada una en un punto de las afueras de Madrid, donde serán acompañadas hasta llegar a Sol.

Durante todo el fin de semana se llevarán a cabo varias actividades, como asambleas interregionales o de estrategias. En el mismo ámbito, se celebrará una marcha desde Atocha hasta la Puerta del Sol el domingo a las 18:00 horas.

Sin embargo, los organizadores manifestaron que aún no han decidido ningún lema con el que encabezar la misma.

Para concluir la jornada, el lunes se celebrará en el parque del Buen Retiro el I Foro Social 15-M, donde se debatirán temas sobre política, feminismo, economía o sanidad.

A pesar de la confluencia de las marchas en Madrid, en las que hasta el día de ayer caminaban 530 personas, los organizadores no preveen una acampada masiva en Sol. "No se está trabajando en esa línea", manifestaron. Sin embargo, reconocieron que "aún no está decidido dónde van a dormir".