El alijo intervenido habría alcanzado un precio en el mercado de 1.770.650 euros y se encontraba oculto en el interior de un contenedor llegado a Barcelona en un buque procedente de China. Las cajetillas iban provistas de precintos fiscales españoles falsificados, así como advertencias sanitarias en español y en inglés.

La operación se ha saldado con la detención de cinco personas, tres de nacionalidad española y dos búlgaros, que han sido puestas a disposición judicial acusadas de un delito contra la propiedad industrial y fraude a la Hacienda Pública.

En la composición de los cigarrillos se detectaron niveles de monóxido de carbono, nicotina y alquitrán muy superiores a los legalmente permitidos, así como productos tóxicos como metales pesados e incluso residuos orgánicos derivados de la falta de higiene y control sanitario en su elaboración