Tomó posesión de su cargo en un acto que tuvo lugar en el Arsenal de Cartagena, en el que también participó el resto de la dotación de quilla del buque, y en el que destacó la importancia de “mantener la ilusión” y “trabajar en equipo”.

La primera dotación del S-81 comenzó a finales de 2019 el proceso de adiestramiento. En los buques nuevos su primera dotación es la conocida como dotación de quilla, que se constituye en varias fases mientras la embarcación todavía está en construcción. Sus integrantes reciben la formación necesaria para operar el buque y están asignados en dicha plaza por un periodo de tiempo mayor.

La formación se ha llevado a cabo principalmente en los simuladores, donde se han familiarizado con los sistemas del submarino. Los miembros de esta primera tripulación también han recibido cursos de mantenimiento y empleo de la plataforma y los sistemas de combate. Esta dotación estará preparada y certificada antes de la puesta a flote del submarino y realizará las pruebas del buque, en puerto y en mar, con el personal del astillero de Navantia. También opera el buque tras la entrega a la Armada durante el periodo de garantía.

Los instructores de la Escuela de Submarinos de la Armada en Cartagena (Esubmar) fueron los primeros recibir la formación a principios del año pasado. El adiestramiento, además de las prácticas en los simuladores, incluye cursos de distinta índole impartidos por suministradores de los principales equipos y sistemas.

Esta escuela cuenta con dos simuladores del S-80 desarrollados por Navantia con el apoyo de socios colaboradores como Indra, SAES y Avio. En el primero, denominado Simpla (Simulador de Plataforma), la tripulación se adiestrará en el manejo del puesto de timonel, el sistema de propulsión y baterías, mientras que, en el segundo, el Simtac (Simulador Táctico), se reproducirán operaciones.

Tras la puesta el flote, el buque iniciará una serie de pruebas en puerto a las que sucederán posteriormente las pruebas de mar. Esta etapa se prolongará durante varios meses y finalizará, si todo marcha según lo previsto, a principios de 2023 con la entrega del submarino a la Armada.