En declaraciones a los medios de comunicación al salir de la cárcel, aseguró que su objetivo ahora será defenderse, una vez que se ha anulado la "única razón" para mantenerle en prisión, "que no hablara".

Su salida de la prisión se producía pocas horas después de que el juez instructor del ‘caso Tandem’, Manuel García Castellón, decretara su libertad provisional, solicitada por la Fiscalía Anticorrupción y su defensa ante la imposibilidad de juzgarlo antes de que venza el plazo ampliado de su prisión provisional (cuatro años), el próximo 5 de noviembre.

Villarejo estaba en la prisión de Estremera desde el 5 de noviembre de 2017, y ahora esperará en libertad el primero de los juicios por las piezas ‘Iron’, ‘Land’ y ‘Pintor’ de la macro causa ‘Tandem’ al que tendrá que enfrentarse a partir del 13 de diciembre. Sobre él pesa una treintena de causas judiciales.

En sus declaraciones ante los medios, alabó a los funcionarios de prisiones, no así al director de la prisión en la que ha estado este tiempo, al que se refirió como un "cancerbero" que ha obedecido "órdenes políticas". A pesar de "maltrato" y de "torturas", aseguró, "sigo vivo", lo cual es "una putada para los que han intentado" que no fuera así.

Calificó de "historieta" la tesis de que no podía salir de prisión porque huiría, y aseguró que quienes han mantenido esa teoría saben que es mentira, porque siempre dijo que no lo haría y no lo hará. Su objetivo ahora, además de descansar, explicó, será únicamente "defenderme".

Preguntado por si acudirá mañana a la cita con el juez que le ha llamado a declarar en una de las piezas contra él, respondió con un "sí, por supuesto", recordando que hasta ahora ha respondido "siempre a todos, hasta a mis amigos de Podemos".

Denunció con ironía que después de haberle "incautado" o "robado" hasta cuarenta teras de información, resulta que no han sido capaces de desencriptarla o no le han dado copias a sus abogados.

Reivindicó además para sí mismo la presunción de inocencia, precisando, además, que a pesar de su jubilación sigue siendo "comisario", porque en los cuerpos jerarquizados una cosa es el empleo y otra el cargo que se desempeña. Sería comisario, precisó, aunque le condenaran "a galeras". "Lo siento por ellos", añadió.

Villarejo aprovechó para asegurar que fue "un honor" trabajar para su país y para defender que "las cloacas no generan mierda, la limpian", y apuntó que le debe al exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán "el tiempo que me ha dado de meditación", en referencia a su estancia en prisión, "para pensar en el bien y el mal".

En su opinión, es "injusto" lo que le está pasando al Rey emérito, al que "tanto" le debe la sociedad española, pero "otra cosa son los intereses" que se cruzan en lo relacionado a lo que ahora se está conociendo.

Aunque le han "robado todo", concluyó que no le pueden robar su convicción de seguir creyendo en la justicia, "porque entonces mi vida no habría tenido sentido".

Preguntado por la grabación del expresidente del Gobierno Mariano Rajoy de la que hablaba el extesorero del PP Luis Bárcenas, y que reforzaría su afirmación de que conocía la contabilidad paralela del partido, Villarejo aseguró que sobre ese asunto "no tengo mucha idea".