Así se expresó Zoreda durante la presentación del barómetro turístico del segundo trimestre y las previsiones para lo que queda de ejercicio, que elabora Exceltur y que revela una ralentización del crecimiento del turismo entre abril y junio, donde el PIB turístico se elevó un 1,9%, frente al 2,4% del arranque de 2011.

De cara al cierre del ejercicio, Exceltur mantiene su previsión de que la actividad turística se incremente un 2,2%, creando unos 40.000 puestos de trabajo.

Respecto a la evoluciíon de la demanda en el segundo trimestre, Zoreda explicó que las llegadas de extranjeros han seguido creciendo, principalmente los visitantes desviados de Túnez y Egipto, mientras la española ha decrecido.

Indicó además que esta será la tendencia previsible para el verano, periodo en el que el 36% de los empresarios prevé mejorar sus resultados con respecto al verano de 2010.