Además, esta organización de consumidores advierte de que la actual subida de los precios de los carburantes va a suponer un coste anual adicional para las familias de entre 180 euros para el diésel y 210 euros para la gasolina por cada vehículo.

Tras analizar los precios del carburante y su relación con el precio de la materia prima desde el inicio de la pandemia, la OCU sostiene que “de nuevo se ha producido un efecto pluma en las bajadas y cohete en las subidas”.

En el mes de abril, según la OCU, la velocidad en trasladar las bajadas fue mucho menor, y no llegaron a aplicarse en su totalidad pues se cortaron de raíz con las primeras subidas del precio del petróleo. Por el contrario, lamenta que la velocidad de subida ha sido mucho más rápida, sobre todo desde el mes de noviembre hasta la actualidad.

Por último, la OCU advierte de que “es probable que continúen las subidas en las próximas semanas y que estas tengan un importante efecto en los bolsillos de los consumidores”.