Madrid. Tres detenidos en Arganda por omisión del deber de socorro a un amigo que se ahogó en una laguna
- Convencieron a la viuda de que su marido había desaparecido y prepararon la escena de la muerte para que pareciese que no habían estado allí
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La Guardia Civil de Arganda del Rey ha detenido a tres personas por omisión del deber de socorro. Los ahora arrestados no alertaron del ahogamiento de uno de sus amigos en una laguna, convencieron a la viuda de que su marido había desaparecido y prepararon la escena de la muerte para que pareciese que no habían estado allí.
Según informó este jueves la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, los tres detenidos, rumanos de entre 23 y 45 años, se encuentran en libertad con cargos tras haber pasado a disposición judicial.
Las investigaciones que han permitido esclarecer un aparente caso de desaparición y que han finalizado con estas tres detenciones comenzaron en la tarde del viernes día 1, cuando se personó en el Puesto de Arganda del Rey una mujer que denunció la desaparición de su marido.
De inmediato se inició un dispositivo de búsqueda por los alrededores de la localidad, en el que intervinieron varias patrullas y un perro de búsqueda de personas. Simultáneamente, otros agentes se entrevistaron con las últimas personas que habían visto al desaparecido, dos amigos con los que había alternado durante la noche previa.
Los testimonios iniciales señalaron que, tras terminar su noche de fiesta, habían decidido bañarse en una laguna próxima a Arganda del Rey, y que el desaparecido se quedó allí, no queriendo abandonar el lugar cuando el resto de los amigos decidieron regresar a sus casas.
El dispositivo de búsqueda permitió hallar la ropa del desaparecido en la orilla de una laguna descrita, por lo que se activó al Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil para que rastrease el lago. Los buzos rescataron del fondo de la laguna el cadáver del varón desaparecido en la mañana del sábado 2, con aparentes signos de ahogamiento.
Los agentes, ante el desenlace del caso, dudaron de las comparecencias iniciales, por lo que se citó a declarar a un tercer testigo, también amigo de la víctima, quien en el interrogatorio incurrió en numerosas inconexiones con el resto de las versiones del caso.
CONFESARON SU DELITO
Los tres amigos fueron citados de nuevo a declarar, y ante las sospechas que se cernían contra ellos, confesaron su delito: cuando acudieron a la laguna, los cuatro habían ingerido una gran cantidad de alcohol y decidieron bañarse para refrescarse y recuperarse mejor de sus excesos.
Fue entonces cuando uno de ellos se introdujo en el agua y se ahogó, no actuando el resto del grupo por miedo a ahogarse ellos también. Tras esperar 15 minutos para comprobar que estaba realmente muerto, los tres amigos acordaron mentir a su viuda, ante el temor de confesar su negligencia.
Los amigos se inventaron la desaparición del fallecido, historia que incluía una coartada para cada uno de ellos para que fuera muy difícil incurrir en cualquier error al prestar declaración. Además, mientras la mujer denunciaba el caso ante la Guardia Civil, volvieron a la laguna y prepararon la escena para que pareciera que el fallecido había acudido solo al lago.
(SERVIMEDIA)
07 Jul 2011
NLV/gja