Así se pronunciaron en la sesión de control al Gobierno que se celebró en la Cámara Baja tras la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para informar sobre la evolución de la pandemia de la Covid-19 y las medidas adoptadas en el marco del estado de alarma que está en vigor.

Gamarra aprovechó para cargar contra la vicepresidenta primera por el hecho de que en Podemos, su socio en el Ejecutivo, “no condenan el vandalismo y no respaldan a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que protegen nuestras libertades y derechos”. Y están “a las órdenes” de Sánchez, avisó.

La portavoz del PP cuestionó así el papel “antisistema” del Ejecutivo ante “la violencia en las calles” tras la encarcelación del rapero Pablo Hasél y también por las declaraciones del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, “atacando” la credibilidad y la libertad de los medios de comunicación la semana pasada en sede parlamentaria.

Calvo replicó que ella es progresista, mientras que Gamarra es conservadora, por lo que seguramente su concepción sobre qué significa ser antisistema no es la misma. En todo caso, la vicepresidenta segunda defendió que “este Gobierno es parte del sistema” y “funciona estrictamente en el sistema”, como no podía ser de otra manera “en la calidad de un Estado de Derecho como el que tenemos”.

Para Gamarra, “si tenemos un Gobierno antisistema es porque el PSOE lo consiente”. “No nos valen sus protestas con la boca pequeña sobre el apoyo de Podemos a los violentos”, sostuvo la portavoz del Grupo Parlamentario Popular, para quien los pactos del PSOE con “el diablo” están “convirtiendo a España en un infierno”.

Ante estas críticas, Calvo explico que para ella un ejemplo de “estar en el sistema” es lo que ha hecho el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, al ponderar en una democracia la libertad con la seguridad durante muchas noches. En cambio, no estar en el sistema es “pasarse por el forro el artículo 116 de la Constitución”.