Irlanda y Chequia son los dos obstáculos que aún debe superar el Tratado de Lisboa para entrar en vigor, algo que el Gobierno español desea de cara a la Presidencia española de la Unión Europea, en el primer semestre de 2010.

Por ello, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, recordó que se trata de una jornada "clave" para ese objetivo, y expresó su confianza en que, la "fiesta de la democracia" que siempre es una cita electoral, sea esta vez también "una fiesta del europeísmo".