No en vano Idaho es el segundo estado en número de vascos y sus descendientes y su capital, Boise, representa la colectividad vasca más activa y emergente  de toda Norteamérica, según destacó en rueda de prensa la portavoz del Gobierno vasco, Idoia Mendia.

Las “buenas relaciones” ya quedaron patentes durante el viaje que realizó el pasado verano el lehendakari, Patxi López, a Estados Unidos en el que tuvo ocasión de mantener un encuentro con el gobernador  de Idaho, Butch Otter. A este encuentro celebrado en el mes de julio, siguió otro, ya en Euskadi, con el vicegobernador Brad Littel  durante la visita que realizó en septiembre al frente de una potente delegación empresarial.

Ambos encuentros sirvieron para explorar la posibilidad de establecer un marco de colaboración permanente, que se materializará con la apertura de sendas oficinas: una en Boise y otra en Bilbao.

Así, el Gobierno Vasco contará en la capital de Idaho con una oficina que dependerá  de la Delegación de Euskadi en Estados Unidos, Canadá y México, cuya sede está en Nueva York. A su vez, el estado de Idaho tendrá a su disposición una oficina que estará situada en Bilbao.

Ambas oficinas operarán durante dos años desde la entrada en vigor del convenio aprobado este martes y serán las encargadas de realizar el seguimiento de las políticas de colaboración, así como de explorar nuevas oportunidades para poner en marcha acciones que beneficien a Euskadi y a Idaho.