En concreto, Cataluña es la tercera comunidad autónoma con la mayor ratio de deuda sobre PIB, sólo por detrás de Comunidad Valenciana (47,7%) y Castilla-La Mancha (39,7%). Junto a Murcia (35,2%), y Baleares (30,1%), son las únicas comunidades con su deuda por encima del 30% del PIB.

Al analizar la evolución de la deuda de Cataluña a lo largo de los últimos años, se observa que hasta 2007 se mantuvo por debajo del 10%, pero el estallido de la crisis económica de 2008 la elevó al 10% en dicho ejercicio para luego crecer cada año hasta alcanzar el 35,6% en 2015.

En los últimos ejercicios, Cataluña había logrado reducir su deuda hasta el 33,4% a cierre de 2019, pero la crisis del coronavirus la ha vuelto a elevar, primero hasta el 33,8% en el primer trimestre de 2020, ya afectada por la pandemia, y al 35,9% en el segundo y el tercer trimestre.

En términos brutos, al cierre del tercer trimestre de 2020 la deuda pública de Cataluña se situaba en 78.292 millones de euros, lo que supone el 25,9% respecto al total de 301.722 millones que alcanzaba entonces la deuda de las comunidades autónomas.

Así, Cataluña es la comunidad con el mayor nivel de deuda en términos brutos, seguida de lejos por los 49.651 millones de euros de la Comunidad Valenciana, los 35.236 millones de Andalucía (23% de deuda sobre PIB) y los 34.801 de Madrid (15,8% de deuda sobre PIB).

Dicho nivel de deuda en términos brutos es inferior a los 79.054 millones en los que se situaba la deuda de Cataluña al término de 2019, para luego alcanzar los 79.424 millones en el primer trimestre de 2020 y 80.015 en el segundo, pero la gran caída de PIB registrada a causa de la crisis del coronavirus, en su caso por encima del 12% en el tercer trimestre de 2020, explica el aumento de la deuda en términos relativos.