En total, el Ejecutivo detalla cada uno de los pasos que dio desde el pasado 26 de mayo, cuando la senadora de Hamburgo Cornelia Prüfer-Storcks, culpó a los pepinos españoles procedentes de Andalucía de la infección que había matado a varios ciudadanos alemanes.

El Gobierno español asegura que la ministra de Sanidad convocó "inmediatemente" al presidente de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN) para pedir explicaciones a la Comisión Europea, la cual respondió no saber nada y solicitó "tiempo para recabar información".

En ese momento también "se activan los protocolos de seguridad para garantizar la salubridad de los productos españoles y garantizar la salud de los ciudadanos".

A las siete y media de la tarde, la Comisión Europea avisó a AESAN que dos empresas españolas de peinos estaban bajo sospecha como origen del brote. La Agencia lo comunicó inmediatamente a la Junta de Andalucía y reclamó a la Comisión información detallada en la que se basaba la alerta. Tras cotejar los datos, concluyó que la información era "incompleta, incluso con errores" y exigió "precisión".

A las nueve de la noche, el Ministerio de Sanidad emitió un comunicado informando a la ciudadanía de la situación y aclarando que "no hay pruebas consistentes de que la bacteria haya salido de España, sino que puede deberse al transporte y manipulado posterior del pepino".

Por su parte, el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino celebró una reunión con la AESAN para intercambiar información y coordinar las actuaciones. El secretario de Estado de Medio Rural y Agua facilitó información telefónica al sector hortofrutícola, antes incluso de activarse la red de alerta.

CONTACTO CON LAS CCAA AFECTADAS

Hubo comunicación de la red de alerta y contacto con la Junta de Andalucía para coordinar la toma de muestras y análisis. La Directora General de Industrias Alimentarias contactó con el Comité Andaluz de agricultura ecológica en relación con la empresa de Málaga de productos ecológicos para conocer su estado de situación. Desde Bruselas, la Representación Permanente de España en la UE contactó con los países importadores para informar de la situación.

Al día siguiente, 27 de mayo, el vicepresidente primero, la ministra de Medio Ambiente y la ministra de Sanidad incidieron en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros en que no había ninguna prueba fehaciente de que los pepinos españoles fueran la causa de la infección.

La AESAN volvió a exigir a la Comisión Europea pruebas de la acusación contra España. El Ministerio de Sanidad contactó con autoridades sanitarias alemanas y mantuvo una audioconferencia con los 27 países miembros, en la que se dan datos epidemiológicos.

La Junta de Andalucía visitó explotaciones, bloqueó partidas de pepinos del mismo lote que los señalados por la Comisión Europea y tomó muestras de pepinos, suelo y tierra para su análisis.

El Ministerio de Sanidad continuó el intercambio de información con la Comisión Europea y logró que esta reconozca que se precipitó al señalar a España. Este mismo día, subrayó que en España no había ningún tipo de infección.

Durante todo el día, hubo conversaciones telefónicas con el sector y una charla formal entre la ministra Rosa Aguilar con la ministra de Agricultura de Alemania. Además, se informó a las comunidades autónomas afectadas (Andalucía, Aragón, Cataluña, Murcia, Valencia).

El fin de semana, España hizo sus propios análisis en el Laboratorio de Referencia de Lugo y la AESAN siguió en contacto con la Comisión Europea para trasladar las lagunas que ofrecía la versión alemana. La representación Permanente de España en la UE se reunió con el resto de países durante el Consejo Informal de Agricultura en Debrecen (Hungría).

El lunes 30 de mayo, la AESAN celebró dos audioconferencias en las que exigió a la Comisión Europea no cerrar fronteras a productos españoles ante la falta de evidencias y la ministra de Medio Ambiente se reunió con representantes de todo el sector afectado.

Se formó un Comité de seguimiento del Ministerio de Medio Ambiente con los representantes del sector y la ministra Aguilar acudió a la reunión del Consejo Informal de Agricultura en Hungría para hablar con sus colegas comunitarios.

El 31 de mayo, la ministra de Sanidad habló con el Gobierno vasco tras la noticia de un enfermo ingresado en San Sebastián, que vino enfermo de Alemania por la bacteria del "E.coli".

El Ministerio de Medio Ambiente celebró una reunión del Comité de seguimiento con el sector, informó igualmente a la sección agroalimentaria de UGT y CCOO. Por su parte, Rosa Aguilar intervino en el Consejo informal de Ministros de Agricultura en Hungría.

RETIRADA DE LA ALERTA

El 1 de junio, la AESAN exigió oficialmente a la Comisión Europea la retirada de la alerta sanitaria contra los pepinos españoles. Se conoció que los estudios del laboratorio de Lugo sobre muestras tomadas en explotaciones de Almería habían dado negativo.

Por la tarde, la ministra de Sanidad mantuvo dos conversaciones telefónicas con el comisario europeo de Salud y Política de Consumidores, John Dalli. Poco después, la Comisión Europea levantó la alerta sobre los pepinos españoles procedentes de Almería.

La ministra Rosa Aguilar solicitó comparecer, a petición propia, en la Comisión de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca del Congreso de los Diputados, para informar sobre las consecuencias que ha ocasionado al sector hortofrutícola el brote en Alemania.

Por su parte, el secretario de Estado para la Unión Europea, Diego López Garrido, se reunió con el presidente de la Comisión de Asuntos Europeos del Parlamento alemán.

El jueves 2 de junio, la ministra de Sanidad trató el asunto con los miembros del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud. La Ministra de Medio Ambiente se reunió con representantes de las comunidades autónomas para informarles.

El laboratorio de análisis de Lugo despejó toda clases de dudas al anunciar que las pruebas sobre los pepinos de Málaga también habían dado negativo.

El Ministerio de Fomento pidió datos a las asociaciones del sector de transporte por carretera sobre la incidencia que la "crisis del pepino" ha podido tener para el sector.

A todas estas actuaciones recopiladas por el Gobierno hay que sumar la conversación telefónica que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, mantuvo por la tarde con la canciller de Alemania, Angela Merkel, quien se mostró dispuesta a estudiar la aprobación de ayudas para el sector español del pepino por los daños causados.