Rajoy consensuó el documento durante un almuerzo “muy gratificante” en la sede nacional del PP con todos los presidentes regionales de su partido, al inicio del cual comenzó con un aperitivo de pepinos -en defensa de este producto de la huerta española- para festejar el triunfo en la reciente cita con las urnas.

Posteriormemte, Rajoy compareció en rueda de prensa para presentar en público el documento, que apuesta por la austeridad, la transparencia y el empleo como los tres ejes para sacar a España de la crisis económica. Era la primera vez en este año que el líder del PP comparecía en rueda de prensa en la sede nacional de esta formación.

En su intervención, Rajoy recalcó que este plan por la austeridad del gasto público pretende trasladar a las comunidades donde gobierne el PP el compromiso adquirido en la campaña de las autonómias y municipales.

Entre las principales medidas a aplicar, Rajoy citó la austeridad como “el mejor antídoto contra los recortes del futuro” y abogó expresamente por fijar un techo de gasto para cada comunidad autónoma, reducir el número de entes públicos, limitar a un máximo de diez las consejerías en los gobiernos autonómicos, reducir las delegaciones territoriales de cada provincia y disminuir el número de altos cargos.

También anunció que las comunidades que gobierne el PP elaborarán un informe de redimensionamiento de las empresas públicas, racionalizarán el gasto corriente, contratán con centrales de compra para lograr mejores precios, contratarán junto a otras administraciones determinados servicios, reducirán los gastos de representación y publicidad, disminuirán el parque móvil, obligarán a los altos cargos a compartir vehículos oficiales, reducirán el número de teléfonos móviles y revisarán las ayudas directas.

TRANSPARENCIA

Rajoy también dio máxima importancia a la transparencia hacia el ciudadano como mecanismo para demostrar una mejor gestión. En este sentido, anunció que se hará un control de las cuentas públicas para conocer la situación financiera de cada comunidad, se harán auditorias al cambiar de gobierno para saber al detalle cómo está la tesorería y se creará un portal web de transparencia que detalle los sueldos de los cargos públicos, el nivel de ejecución presupuestaria y el avance de los expedientes de contratación.

La tercera pata de este plan, según Rajoy, es el fomento del empleo. Para ello cree imprescindible aprobar un plan de emprendedores que no suba los impuestos a los autónomos, agilizar los trámites empresariales a través de la administración electrónica, eliminar las trabas burocráticas, mejorar las medidas de financiación a emprendedores, revisar la normativa autonómica y local, así como una gran apuesta por la mejora de la educación.

Indicó que la educación es clave para fomentar la productividad y el empleo en el futuro, por lo que avanzó que las comunidades donde gobierne el PP aprobarán una ley que reconozca a los profesores como autoridad pública, implantarán evaluaciones externas para conocer el rendimiento de cada centro, se harán pruebas de nivel al final de cada etapa, se dará libertad en la elección de centro, se respetarán los actuales sistemas de concierto, se impulsarán los colegios bilingües (o trilingües en el caso de País Vasco, Galicia o Cataluña), se mejorará el gobierno de las universidades y habrá un calendario unitario para las pruebas de acceso a la universidad.

CONSEJO DE POLÍTICA FISCAL

Además, Rajoy lanzó tres retos al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero tras la derrota del PSOE en las elecciones autonómicas del 22 de mayo y una vez que el PP va a gobernar a partir de ahora en 10 de las 17 comunidades, más las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.

En particular, el presidente del PP exigió la convocatoria del Consejo de Política Fiscal y Financiera para tomar medidas de estabilidad presupuestaria con vistas a este ejercicio de 2011, reclamó una reunión de la Federación Española de Municipios y Provincias para poner en marcha políticas de austeridad y pidió una “convocatoria urgente” de la Conferencia de Presidentes para hablar de creacion de empleo, reformas educativas y prestación de servicios públicos.

Dentro del ámbito económico, Rajoy reconoció tener “preocupación” por la bajada de la recaudación del Estado, ya que todos los ingresos por impuestos han bajado en los últimos meses con la única excepción del IRPF, al que reconoció que “ha subido muy poquito”.

A su juicio, esto representa un “síntoma” de que la economía española no se está recuperando y, lo que considera más importante, que no está siendo capaz de generar empleo.