Clima

Limitar el cambio climático implica bajar un 1,8% anual las emisiones comprometidas por los países

- Según un nuevo estudio

MADRID
SERVIMEDIA

Las emisiones globales de gases de efecto invernadero deben reducirse un 80% respecto a los planes climáticos presentados por los países a la ONU en el marco del Acuerdo de París, lo que supone una reducción anual de un 1,8%, con el fin de limitar el aumento de temperatura del planeta a 2ºC con respecto a la época preindustrial.

Así se explica en un estudio realizado por la Universidad de Washington (Estados Unidos) y publicado este martes en la revista 'Communications Earth & Environment'.

En 2017, un estudio ampliamente citado utilizó herramientas estadísticas para modelar la probabilidad de que el mundo cumpla los objetivos de temperatura global recogidos en el Acuerdo de París, esto es, que el planeta no se caliente más de 2ºC en comparación con la era preindustrial y hacer los esfuerzos necesarios para que el calentamiento se acerque a 1,5ºC. Ese análisis encontró que, según las tendencias actuales, la Tierra tenía sólo un 5% de posibilidades de mantenerse por debajo de los 2ºC de calentamiento en este siglo.

Los mismos autores se plantearon después qué recortes de emisiones se necesitarían realmente para cumplir con el objetivo de calentamiento de 2ºC, considerado un umbral para la estabilidad climática y los riesgos relacionados con el clima, como el calor excesivo, la sequía y el aumento del nivel del mar.

El nuevo trabajo señala que una caída media de un 1,8% anual en las emisiones globales de CO2 (o un 80% respecto a los compromisos climáticos de los países) bastaría para mantenerse dentro del objetivo de los 2ºC. "Varias personas han dicho, particularmente en los últimos años, que los objetivos de emisiones deben ser más ambiciosos", apunta Adrian Raftery, profesor de estadística de la Universidad de Washington y autor principal del trabajo, que añade: "Fuimos más allá para preguntar de una manera más precisa: ¿Cuánto más de ambiciosos necesitan ser?".

El documento modela los tres principales impulsores de los gases de efecto invernadero producidos por el ser humano: la población nacional, el producto interior bruto por persona y la cantidad de carbono emitido por cada dólar de actividad económica, conocida como intensidad de carbono. Luego utiliza un modelo estadístico para mostrar el rango de resultados futuros probables basados ​​en datos y proyecciones hasta el momento.

Con métodos actualizados y datos desde 1960 hasta 2015, la conclusión sigue siendo similar a la del estudio de 2017: el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París daría sólo un 5% de probabilidad de mantenerse por debajo de los 2ºC de calentamiento.

Suponiendo que las políticas climáticas no se centrarán en el crecimiento de la población o el crecimiento económico, los autores se preguntaron qué cambio en la intensidad de carbono sería necesario para alcanzar el objetivo de calentamiento de 2ºC y concluyeron que una reducción media de un 1,8% anual en las emisiones de carbono daría al planeta un 50% de posibilidades de mantenerse por debajo de los 2ºC de calentamiento en 2100.

“MENTALIDAD DIFERENTE”

El estudio analiza lo que este plan general significaría para los compromisos del Acuerdo de París de diferentes países, que han fijado sus propios compromisos de reducción de emisiones. Así, Estados Unidos se ha comprometido una caída de un 1% anual en las emisiones de carbono hasta 2026 y China establece como objetivo reducir su intensidad de carbono, o las emisiones de carbono por unidad de actividad económica, en un 60% para 2030 con respecto a sus niveles de 2005.

Si la contribución climática de cada país se mantiene sin cambios, Estados Unidos necesitaría aumentar su objetivo en un 38% para hacer su parte de lograr el objetivo de 2ºC. Otros países necesitarían aumentos menores, como China (un 7% más) y Reino Unido (17%).

"Hasta cierto punto, el discurso sobre el clima ha sido: 'Tenemos que cambiar completamente nuestros estilos de vida y todo'". La idea de nuestro trabajo es que, en realidad, lo que se requiere no es fácil, pero es cuantificable. Reducir las emisiones globales en un 1,8% por año es un objetivo que no es astronómico", recalca Raftery, que concluye: "Si dices 'todo es un desastre y necesitamos reformar radicalmente la sociedad', hay un sentimiento de desesperanza, pero si decimos que 'necesitamos reducir las emisiones en un 1.8% al año', ésa es una mentalidad diferente".

(SERVIMEDIA)
09 Feb 2021
MGR/gja