La ministra reconoció, durante un encuentro informativo organizado por el Cercle d’Economía, que Cataluña “es uno de los motores principales de la economía española” y uno de los motores “de la innovación, del crecimiento, de la prosperidad, de la cohesión social de nuestro país y tiene que seguir siéndolo”.

Al respecto, Calviño confesó admirar a la sociedad catalana y al empresariado catalán y estimó “muy importante que, desde todas las administraciones públicas, hagamos todo lo posible por que Cataluña vuelva a jugar el papel que creo le corresponde en el conjunto de España”.

La pregunta específica era sobre las oportunidades que se abren a Cataluña con los fondos europeos y el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia aprobado por el Gobierno para modernizar la economía, hacerla más productiva y mejorar su capacidad de crecimiento, y si un Gobierno independentista podría condicionarlo.

Soslayando la pregunta específica, Calviño sí mostró su deseo de que se dé “una excelente colaboración a nivel del Estado, de la comunidad autónoma, de los ayuntamientos” porque “será clave para que podamos desplegar de la manera más eficaz posible este plan de recuperación para todo el territorio español”.