Aguirre participó en el mitin de cierre de la campaña electoral del PP, celebrado en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid ante cerca de 16.000 personas, junto al alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, y el presidente nacional de los populares, Mariano Rajoy.

En su discurso, Aguirre proclamó que “ha llegado la hora de que los españoles elijan un gobierno eficaz para salir de la crisis” después de siete años de mandato del PSOE tras los que considera que hay “muchísimos millones de españoles indignados por tanta indignidad de este Gobierno”.

“El domingo por la noche, Zapatero tendrá que convocar elecciones generales”, dijo. “Ya no les valdrán las excusas. Esto no puede seguir así y los ciudadanos lo van a gritar pacífica y democráticamente desde las urnas votando”.

Aguirre presumió de que “la economía de Madrid crece sin pausa al mismo ritmo que los demás países de la Unión Europea” y, como prueba, sacó a relucir la creación de 30.000 puestos de trabajo en el último año y que la tasa de paro es “seis puntos menor que la del conjunto de España”.

Aguirre adujo que la tasa de paro juvenil es “nueve puntos inferior” a la del conjunto de España, lo que para ella tiene mayor mérito cuando en La Monclo ha estado el Gobierno de España “más inútil, más ineficaz y más irresponsable” de la historia de la democracia.

La gente se vino arriba y comenzó a gritar “¡Zapatero, dimisión!” una y otra vez, mientras que Aguirre les arengaba todavía más subrayando que, después de siete años de gobierno socialista, “las arcas del Estado están vacías y las calles están llenas de cinco millones de parados”.

Aguirre auguró que “todo esto se va a acabar el domingo” con una victoria del PP en las elecciones autonómicas y municipales que servirá, entre otras cosas, para que los representantes de los terroristas, en alusión a Bildu, no puedan estar en las instituciones.