Mogín, que intervino en el seminario "El nuevo marco de las fundaciones y el mecenazgo en España" que se celebra en la Universidad Internacional Menéndez y Pelayo (UIMP) de Santander, reclcó que un 96 por ciento del total del gasto de las fundaciones adscritas a Asuntos Sociales se aplica en el cumplimiento de los fines fundacionales.

Las personas con minusvalías, los ancianos, los enfermos, la población necesitada y la infancia son los principales beneficiarios de los programas asistenciales que llevan a cabo las 1.007 fundaciones inscritas en el departamento que dirige la ministra Crisitina Alberdi.

Durante su ponencia en el encuentro, organizado por la Confederación Española d Fundaciones (CEF), María Teresa Mogín insistió en la necesidad de potenciar desde la Administración la participación de la iniciativa privada en el mantenimiento del estado del bienestar.

A su jucio, la Administración debe ser una "agencia casamentera" capaz de unir la demanda de la sociedad con la oferta de actividades que nace del sector privado. No obstante, precisó que para consolidar las políticas de bienestar social es necesario un sistema público solvente que garantice a los ciudadanos los derchos universales.

En esta línea destacó los convenios de colaboración con empresas como Iberia, el Banco Exterior de España, Argentaria o la Universidad Atónoma de Madrid, donde se desarrolla un máster en administración y dirección de fundaciones y otras entidades no lucrativas patrocinado por el Ministerio de Asuntos Sociales y la Fundación ONCE.

GESTION

Por su parte, el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) ya ha concluido su informe para la elaboración de un Plan Contable pra Fundaciones, que deberá redactarse a través de un decreto y entrar en vigor antes del próximo mes de noviembre. El plan es el resultado de la adaptación sectorial a las entidades no lucrativas del Plan General de Contabilidad.

La nueva Ley de Fundaciones y Mecenazgo obliga a todas las fundaciones a rendir cuentas a la Administración, para lo cual deberán presentar sus resultados, una memoria de sus actividades y un informe detallado sobre su financiación.

Además, las fundaciones están obligada a someterse a una auditoría si durante dos años consecutivos cumplen al menos dos de los tres requisitos siguientes: poseer un patrimonio de más de 400 millones de pesetas, que el importe neto de su volumen anual supere los 400 millones y tener una plantilla de 50 o más empleados.