"En España, el solapamiento de la crisis financiera y real, junto con la acumulación previa de importantes desequilibrios,

ha sumido la economía en una recesión de profundidad desconocida", explica la patronal bancaria.

Así, la AEB apunta que, desde la pasada primavera, los indicadores económicos señalan una menor intensidad en el proceso de deterioro, "aunque la salida de la recesión se prevé lenta y laboriosa".

Por ello, recomienda evitar que el peso de los desequilibrios y rigideces "sean un obstáculo para aprovechar la previsible fase de recuperación internacional".