Se trata de “reforzar la educación, reforzar la sanidad, reforzar todo aquello que compone el bienestar de nuestra sociedad”, explicó en el Congreso a la pregunta del diputado de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, sobre qué hará el Gobierno “ante el grave empeoramiento de la economía española”.

Calviño explicó que dichas actuaciones son “medidas decididas” que el Gobierno viene aplicando desde marzo y “nos permiten proteger una base sobre la que impulsar la recuperación”, subrayando que todo el esfuerzo que se está comprometiendo “por el conjunto de los españoles, se dedica precisamente a que nadie quede atrás”.

“En eso vamos a seguir en esas prioridades que tenemos claras y espero poder contar con su apoyo, porque estamos hablando de un proyecto de país para que el 2021 sea el año de la recuperación”, abundó.

Al respecto sintetizó en tres las prioridades: “seguir luchando eficazmente contra la pandemia y desplegar la vacunación”; “evitar un daño estructural en nuestro tejido productivo y nuestro empleo, con inversiones, con reformas” y con las ayudas desplegadas que garantizó que “seguiremos dando para apoyar ese tejido productivo y tener una base para la recuperación” y, en tercer lugar, desplegar los Presupuestos y el plan de recuperación “tan importante para el futuro de nuestro país”.

El diputado de Vox había denunciado previamente que la economía arroja datos “cada vez más preocupantes” en alusión, por ejemplo, a la caída del 11% del PIB el pasado año, y reprochó al Gobierno crear mientras tanto 120.000 empleos en el sector público, “que es la única industria que crece en estos tiempos de crisis: lo público” y, a pesar de que “cuatro de cada diez nuevos parados en Europa, lamentablemente están en España”.

Espinosa de los Monteros afeó que han incrementado el sector público “de una manera brutal”, “no la sanidad, el gasto público”, a la vez que son “capaces de gastar 100 millones de euros en coches oficiales” o “450 millones de euros en el ministerio de Igualdad para que la señora Irene Montero explique a los embajadores de España cómo tratar a un transexual”.

“Mire, cuando la izquierda gobierna hace mucho daño a la economía. Si es una izquierda moderada hace un daño moderado. Si es una izquierda radical hace un daño radical. Y ustedes están haciendo un daño radical porque son un gobierno radical porque están en manos de extremistas”, agregó, urgiendo a que “reduzcan el tamaño del Estado”. “Es urgente que reduzca los impuestos. Es urgente que reduzcan las trabas para aquellos que crean empleo. Es urgente que indemnicen al comercio, a la industria, a los servicios, a los que ustedes han impedido seguir trabajando y, si no saben o no quieren hacerlo, váyanse antes de que quiebre España definitivamente”, le espetó.

Algo a lo que la vicepresidenta económica replicó que cuando hablan de empleo público le “genera muchas dudas” sobre a qué se refieren “porque el empleo público es la sanidad, es la educación, es la policía, es la seguridad de todos los ciudadanos españoles”. “No tengo ningún tipo de problema en decir que sí, estamos reforzando el Estado de bienestar en nuestro país”, agregó.

Por otro lado, y a preguntas del diputado del PP, Tomás Cabezón, sobre las reformas comprometidas por España a la Comisión Europea defendió que “son las reformas que hemos venido impulsando desde hace más de dos años y medio”, las que “nos ha venido recomendando la Comisión Europea y las instituciones internacionales en los últimos años” y las que se han estado impulsando también el año pasado.

“En paralelo a la respuesta a la pandemia, en el ámbito de la educación, en el ámbito de la ciencia, en el ámbito del hidrógeno verde, de la ley de cambio climático, en el ámbito del clima de negocios, un conjunto de acciones que conoce bien porque están en ese Parlamento y porque han sido explicadas exhaustivamente por el Gobierno”, le replicó, para “impulsar la recuperación” y “transformar nuestro modelo productivo, modernizarlo y conseguir un crecimiento más sostenible a medio y largo plazo”.

El diputado del PP le había reprochado, con “unanimidad en los portavoces de los diferentes grupos parlamentarios”, la “falta de concreción en sus explicaciones” en el Parlamento, pese a que “nos jugamos la llegada de 140.000 millones de euros” y mientras en el Gobierno “están en la pelea, en las filtraciones y en su lucha de egos”.