Así lo precisó Garzón durante su intervención en la sesión de control al Gobierno en el Senado en respuesta a una pregunta de la senadora del Grupo Parlamentario Popular Paloma Inés Sanz, que se interesó por las actuaciones previstas por su departamento ante las fluctuaciones en el precio de un bien de consumo de primera necesidad como la electricidad, y a la que aseguró que el Ejecutivo de Pedro Sánchez tiene una “hoja de ruta” para corregir esta realidad.

El titular de Consumo reconoció que a principios de este año hubo un “pico máximo” en la tarifa regulada por la asignación de precios en el mercado de subastas que supuso un encarecimiento del 27%, pero recordó que a finales de mes se produjo también un mínimo histórico “con los mismos impuestos”.

Por ello, instó a "descartar la tasa impositiva como la causa de la factura de la luz o del precio de la electricidad” e insistió en que, por su estructura oligopólica, en el actual mercado tres grandes empresas controlan más del 60% de las ofertas en la subasta y sus filiales, más del 60% de las compras.

A su juicio, la “evidencia empírica” demuestra que, cuando se suben los impuestos, “sube efectivamente el coste del producto final, pero, cuando se bajan, si la estructura del mercado es un oligopolio, lo que ocurre es que se sube el beneficio de las empresas y se mantiene el precio de los productos”.

Tras incidir en que existe una tendencia a la bajada del precio de la electricidad en los dos últimos años del 40%, lo que, espetó, “repercute en la factura”, reiteró que existen “oscilaciones, al alza y a la baja” sobre una tendencia “de pendiente negativa, decreciente”.

“Eso es lo que nos importa”, sentenció, al tiempo que subrayó que aquellas familias que no puedan afrontar el coste de su recibo, “a pesar de todo eso”, disponen de un bono social que el Gobierno “va a reforzar”, al tiempo que trabajará para que el mercado “funcione eficientemente" y por incrementar el peso de las energías limpias en el mix eléctrico, consciente de la necesidad de realizar “reformas estructurales” en torno a un sistema de mercado que, además de sufrir “graves errores de gestión”, estaba “pensado y diseñado para la era de los combustibles fósiles”.

Por su parte, la senadora ‘popular’ volvió a preguntarle si el Ejecutivo “piensa equiparar el IVA de la luz a la media europea”, para, a continuación, denunciar que España “tiene uno de los tramos más altos y mucho más elevado que en países del entorno”, ya que en Italia sólo se aplica el 10% para los bajos consumos domésticos y en Portugal, un 13%.

Tras coincidir con Garzón en que “ningún Gobierno decente debería tolerarlo”, le emplazó a trabajar para evitar estos encarecimientos y por rebajar la factura de la luz de las familias, algo que, a su entender, “se consigue bajando el IVA”, tal y como han demandado las asociaciones de consumidores.

“No diga ahora que esto no es posible, porque todos sabemos que esto no es así”, advirtió, para, acto seguido, lamentar que el PSOE “arremetió gravemente” contra el Gobierno de Mariano Rajoy en diciembre de 2017 cuando la factura se incrementó un 8%, “muy lejos del 27% de este primero de año de 2021”.

La senadora denunció la “alevosía” de Garzón y aseveró que, “por mucho bono social, si el precio de la energía y el gas se dispara en plena ola de frío, se arroja a miles de economías familiares a la pobreza energética”. “Esto sí que es la gran estafa política del escudo social”, agregó, para emplazar a Garzón a adoptar las medidas “necesarias y oportunas” para atajar el “aumento desproporcionado” de la electricidad.