Moratinos, en declaraciones a Radio Nacional recogidas por Servimedia, señaló que pese a que España llamó “a consultas” a su embajador se mantienen relaciones diplomáticas con el país y allí se quedaron tres diplomáticos pendientes de los españoles y hondureños que los requieren.

El ministro espera que el embajador Javier Rupérez “pueda regresar cuanto antes” pese a las amenazas del golpista Roberto Micheletti de que no permitirá su entrada en el país hasta que no le reconozca como autoridad máxima de Honduras. Recalcó que Rupérez sigue teniendo el reconocimiento del "Gobierno (hondureño) democráticamente elegido" de Zelaya.

España, insistió Moratinos, mantendrá la “misma posición desde ese golpe militar” que es “no reconocer” a esas autoridades que encabeza Michelitti, a la vez que manifestó que no quieren “tensar más las relaciones” sino “ayudar a encontrar una salida pacífica de esta crisis”.

El jefe de la diplomacia española confirmó que las autoridades hondureñas han rechazado la entrada de dos diplomáticos españoles y de tres representantes de la a tres de la Organización de Estados Americanos (OEA). El Ejecutivo de Micheletti, apostilló, está “aislado” así que “ellos sabrán” la deriva que adoptan mientras que los países de la comunidad internacional vamos, añadió, a seguir haciendo “todos los esfuerzos” necesarios para que no se cree “más tensión” y se solucione la crisis en el país centroamericano.