Rajoy hizo estas declaraciones en Santa Cruz de Tenerife durante una declaración en plena calle rodeado de militantes, al término de la cual no admitió preguntas de los periodistas. En el acto estuvo acompañado por el candidato del PP a la Presidencia de Canarias, José Manuel Soria, y la candidata al Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, Cristina Tavío.

A su juicio, esta campaña electoral “tiene algunas características especiales, como que la estrategia del PSOE se basa “en hacer oposición a la oposición, y cuando haces oposición a la oposición te mandan a la oposición pronto, que es lo que le va a pasar al Gobierno para fortuna de los españoles”.

Rajoy criticó que el PSOE “no quiere hablar de lo que le importa a los españoles”, como la economía, la ausencia de crédito para familias y empresas o el paro. “Lo único que dice de eso es que la culpa la tienen los que estaban gobernando hace siete años”, apostilló.

CULPAR A DI STEFANO

En este punto fue cuando Rajoy esgrimió que responsabilizar ahora del Partido Popular de la crisis y los cinco millones de parados “es como si se echa la culpa a Di Stefano de que el Real Madrid no haya llegado ahora a la final de la Champios League”.

El líder de los populares aseguró que el PP se va a dedicar a hablar de empleo y economía en esta campaña. De hecho, su intervención estuvo centrada en hablar únicamente de la crisis en España y en Canarias y, al finalizar, no atendió los intentos de los periodistas por hacer preguntas sobre la presentación de la coalición abertzale Bildu a las elecciones municipales del 22-M.

Como solución, pidió el cambio en Canarias y en España, porque “no estamos condenados” a tener un gobierno “aburrido” que no defiende los intereses de los ciudadanos y que parece más preocupado “de los recortes que de aumentar los ingresos del Estado”.

Al terminar, también arremetió contra Coalición Canaria, porque “le ha faltado la gallardía, el coraje y el empuje” para romper con el Partido Socialista por su “incumplimiento” en las inversiones que había prometido a las islas.