En caso de que el estudio no estuviera finalizado en esa fecha, Carrasco confía en que debe ser el Banco de España quien esté "vigilante" para que el proceso "no se dilate y perjudique al sistema financiero de la Comunidad, así como a los ciudadanos".

Carrasco dejó clara su apuesta por una única caja de ahorros en Castilla y León, y recordó que en sus ocho años como consejera de Economía de la Junta de Castilla y León ya hubo un intento de fusión en 1999.

"Lo teníamos que haber hecho, habría sido la cuarta de España. Se necesita un músculo financiero fuerte en la Comunidad", apostilló la vicepresidenta primera de Caja España.